El campeonato Nacional del béisbol finalizó con el título para Saprissa, superando ampliamente a un conservador Huracanes, en cinco, de los siete juegos programados.
Saprissa, con Alberto Cabrera como lanzador, fue el amo del diamante del Parque Escarré; ganó tres juegos, uno de relevo, logrando victorias 2 x 1, 15 x 2, 8 x 4, 9 x 4 y solo una derrota por 6 x 5, ante Huracanes que fue muy conservador, pensando más en el próximo juego, que en el que estaban en ese momento.
Los morados fueron muy superiores con mejor bateo, haciendo las cosas bien, hasta con un triple play (tres outs en una jugada), ganando los juegos que se necesitaban para lograr el título, habiendo tenido una clasificación muy apretada.
En el juego del sábado Saprissa se guardó a Cabrera como relevista y colocó a Johnny Cabezas como abridor y le resultó bien la estrategia, al no aprovechar Huracanes esa oportunidad, porque en la segunda entrada pudo haber tomado una mejor ventaja, cuando, Andrés Simancas empujara las dos primeras carreras del juego y con dos corredores, en base cayó el triple outs, ante linea de Jean Carlo Benavides, que agarró movidos a Erlyn Zapata y a Simancas, para aplacar la sublevación, que pudo haber cambiado el juego.
En la quinta entrada Saprissa consolidó el título, cuando Huracanes utilizo tres lanzadores y le hicieron un racimo de 8 anotaciones, dos con triple de Carlos Soto Jr., una de Darío Smith y el segundo imparable de Waylon Hadden en esa entrada para enviar tres carreras al plato, completando las nueve de la victoria, porque luego entró Cabrera y fue el amo, de la otra mitad permitiendo solo un imparable de Francisco Gutiérrez en la octava entrada.
Sin duda alguna el título queda en buenas manos, con un equipo con una mezcla de novatos y veteranos, que de seguro esperan consolidarse en el próximo Torneo de la Independencia a iniciarse en el mes de setiembre.