Oriundo de Tilarán, Guanacaste, Róger Ajún Blanco se convirtió en uno de los narradores deportivos más populares en la televisión nacional cuando se desarrollaba la década de los 90’s.
El orgulloso guanacasteco figuraba en las transmisiones del entonces Canal 2, Univisión, y además de poseer una excelente descripción se caracterizó por colocar seudónimos a los jugadores de la Primera División del fútbol nacional.
Actualmente está divorciado, tiene cuatro hijos, labora para Canal 36 en su natal Guanacaste, y de sus palabras se denota una gran fortaleza espiritual.
Periódico Pura Vida contactó al narrador para actualizar la memoria de aquellas personas que aún recuerdan, y hasta extrañan, su presencia en la pantalla de los canales televisivos tradicionales de Costa Rica. Una figura orgullosa de ser costarricense, de ser guanacasteco.
-¿Cómo fue su infancia?
Como todo niño guanacasteco, en el campo, amigos y mejengas.
-¿Y cómo es que logró surgir en la vida?
Con la bendición de Dios y mucho trabajo.
-¿Fue un buen estudiante?
Normal, como muchos, ni excelente ni malo, cumplía.
-¿Cuál fue la mejor enseñanza de sus padres?
Me inculcaron la honestidad, honradez y el trabajo.
-¿Casado, con familia?
Divorciado y con 4 hijos.
-¿Qué rol juega la familia en su vida?
Uno de los más importantes, porque el más importante es Dios.
-¿Cuál es la mejor herencia que un padre puede darle a sus hijos?
La mejor enseñanza es que aprendan que Dios es lo más importante, porque con la ayuda de Él, todo es posible.
-¿Qué estilo de vida lleva actualmente?
Trabajando todos los días como siempre lo he hecho, solo que ahora en la producción de televisión.
-¿Se siente orgulloso de ser Guanacasteco?
Por supuesto, inmensamente orgulloso de ser cédula 5.
-¿Qué particularidad de los guanacastecos debería copiar el país?
Que somos gente muy honesta, amigables y muy trabajadores
-¿Recuerda cómo se dio su incursión en la Televisión?
Por una invitación de Jose Luis “El Rápido” Ortiz (q.d.D.g) para narrar el Mundial del 90 en Canal 6.
-¿De dónde nació la idea de poner seudónimos a los jugadores?
Eso forma parte de mi estilo de narrar, es algo innato y muy particular.
-¿Tuvo problemas en su momento con alguna figura por eso?
Nunca, todo lo contrario. Algunos jugadores me lo agradecían.
-¿Considera que usted marcó una diferencia en la narración televisiva?
No creo. Simplemente hacía lo que me gustaba, esperando que a la gente le gustara también.
-¿Por qué dejó la televisión?
Nunca la he dejado, me mantengo trabajando en ella, en Canal 36 de Liberia. Es un proyecto que nació en el 98 de la mano de Ramón Coll.
-Usted fue una figura emblemática para los costarricenses, con mucha identidad. ¿Por qué se dio ese aprecio de la gente?
Los liguistas mucho me quieren, pero otros no tanto (risas).
-¿Y sigue narrando?
Siempre, nunca lo he dejado. Ahora narro los partidos de la ADG (Asociación Deportiva Guanacasteca), Liberia y Cartagena (Liga de Ascenso del balompié costarricense).
-¿Qué cargo desempeña actualmente?
Dirección y producción de televisión en Canal 36 de Guanacaste.
-¿Le gustaría regresar a un canal tradicional?
Si se refiere a canales nacionales la verdad que no, aquí estoy bendecido y soy plenamente feliz en mi tierra.
-¿Quiénes marcaron su vida profesional?
Jesucristo, Parmenio Medina (q.d.D.g),y Jose Luis “El Rápido Ortiz (q.d.D.g), dos grandes amigos y compañeros de trabajo.
-¿Qué legado le dejaron?
De Parmenio que con trabajo y sacrificio lo puedes lograr; de José Luis a creer y tener fe en uno.
-¿Cuándo y por qué se convirtió al evangelio?
Hace como siete años,y es lo mejor que he podido experimentar en mi vida,es extraordinario no me falta nada con Él lo tengo todo.
-¿Cuál es su testimonio don Róger?
No tengo un gran testimonio, pero sí le puedo asegurar que Dios es sencillamente fuera de serie, es mi mejor amigo.
-¿Pero qué generó el cambio?
La necesidad de el nosotros, fuimos diseñados por Él y solo podemos caminar bajo la poderosa mano de Él; es como un auto, ¿podrá caminar sin gasolina?… No. Igual nosotros, sin Él no somos nada.
-¿Cuál es su sueño en estos momentos?
Poder servirle a Dios, como él me ha servido a mí, y ver a mis hijos realizados y felices.
-¿Cómo llegar al éxito?
Tomado de mano de Dios, porque separado de Él, nada podemos hacer.