El Servicio Nacional de Guardacostas, como parte de su compromiso con la conservación de los recursos marino costeros, inició un fuerte operativo el pasado fin de semana para proteger el pez calva, dado que dicha especie se encuentra en pleno desove.
Los patrullajes han tenido lugar en los ríos, lagunas y canales ubicados a lo largo del Refugio de Vida Silvestre de Barra del Colorado, situado en el distrito de Colorado, cantón de Pococí, en el Caribe norte.
Según explicó el comandante Mauricio Mora, biólogo marino del Guardacostas, el principal propósito de estas acciones es prevenir la pesca ilegal del pez calva, que de manera masiva llega procedente del mar Caribe en estos días para desovar en tales sitios.
Esta situación es aprovechada por algunos lugareños, quienes colocan trasmallos para atrapar dichos peces, actividad que es sumamente ilegal, pues se trata de una zona protegida en la que utilizan dicho arte de pesca, el cual es prohibido, impidiendo así la reproducción del pez calva, además de afectar otras especies.
Mora explicó que, entre el domingo anterior y la madrugada de este lunes, han localizado nueve trasmallos y unos 90 peces, de estos 50 estaban vivos, por lo que fueron liberados de inmediato, mientras que el resto fue desechado.
Con estos patrullajes el Guardacostas también protege al pez gaspar, pues algunos de los especímenes encontrados dentro de los trasmallos eran de dicha especie, la cual es propia de la zona y que, con las prácticas de pesca ilegal desarrolladas en esta época, también se ve afectado.
El biólogo explicó que el operativo concluiría durante los primeros días de febrero del 2016, que es cuando finalizará la temporada de desove del citado pez.