Don Germán, vecino de Barrio La Luisa, una comunidad ubicada en los alrededores de La Uruca y Mata Redonda, en San José, recuerda como hace apenas 50 años, las aguas del Río Torres aplacaban cualquier día de calor en pleno verano.
“Nos bañábamos en este río, era un río limpio; hoy día da lástima ver cómo está, todo deforestado y muy contaminado”, recuerda con nostalgia.
Por las aguas del Río Torres corre todo tipo de basura, pero también la esperanza de muchas personas que se han organizado para recuperarlo y convertirlo en inspiración para cuidar la naturaleza que nos pertenece, que nos da salud y bienestar.
Esto es lo que mueve a los Amigos del Río Torres, una asociación sin fines de lucro que desde el 2014 se ha dedicado a realizar acciones para recuperar esta microcuenca urbana de 26 kilómetros de longitud, que nace en el sector de Rancho Redondo y cruza por importantes puntos de los cantones de Goicoechea, Montes de Oca, Tibás y San José, hasta unirse con el Río Tiribí, con el Virilla y desembocar en el Grande de Tárcoles.
Charlie Velázquez, presidente de la Asociación recuerda que todo empezó con la propuesta de una pareja extranjera que tenía el sueño de devolverle a Costa Rica su recibimiento y cariño, a través de los ríos y formar a los márgenes del Río Torres un river walk, que permitiera pasear por este, conectar la ciudad, tener infraestructura.
“Con el pasar del tiempo, el sueño fue cambiando un poco y nos dedicamos 100% al rescate del río a través de la concientización y participación de la ciudadanía. Cada vez que venimos y escuchamos el río, las aves, deseamos que todas las personas en San José se den la oportunidad de conocer los márgenes de los ríos, queremos darle el frente y no la espalda a los ríos”, indicó Velazquez.
Robert Faulstich, empresario que reside en Costa Rica y quien colabora con el proyecto desde 2014, asegura que aunque no tenga la certeza de qué va a pasar con el río, sabe que a su alrededor hay un enorme potencial para recuperar la ciudad. Su pasión lo lleva hasta 3 días por semana a visitar sectores del río donde han podido sembrar árboles, formar trillos y senderos y limpiar los márgenes, con la esperanza de que algún día se podría incluso volver a nadar en el río.
“Honestamente, qué va a pasar aquí, no sé, pero yo me dije hace años que es un potencial que no se puede perder. Por eso he venido durante todos estos años y seguiré viniendo mientras tenga fuerza”, comentó.
Bolsas reutilizables inspiran a amar al Río Torres. Una campaña liderada por Auto Mercado le invita a inspirarse, a conectarse con la naturaleza y colaborar con las distintas acciones de recuperación del Río Torres, promovidas por la Asociación Amigos del Río Torres.
Se trata de una colección de tres bolsas reutilizables la cual, bajo la campaña “Yo ❤️ al Río Torres”, hace un lúdico recorrido por importantes puntos por los que pasa el río como el Parque del Este, el Museo de los Niños, Macromural Barrio La Luisa, el Monumento al Agua y el Aeropuerto Tobías Bolaños, entre otros.
“Desde nuestra área de Responsabilidad Social y Sostenibilidad hemos venido impulsando el desarrollo de productos con propósito y en este caso tenemos la grandísima oportunidad de lanzar una colección de bolsas reutilizables, para beneficiar todo el trabajo maravilloso e importantísimo que están haciendo los Amigos del Río Torres, en la recuperación de espacios naturales que nos aportan salud, bienestar y que además nos pertenecen a todos. Sus esfuerzos son realmente inspiradores porque tiene una perspectiva de largo plazo, que eso para nosotros en Auto Mercado es súper importante”, comentó Silvia Pérez-Baires, encargada de Responsabilidad Social Empresarial y Sostenibilidad de Auto Mercado.
Con la venta de cada bolsa de esta nueva colección, Auto Mercado estará destinando un ¢200 a la Asociación. Cada bolsa se vende al precio de costo y tiene un valor de ¢1.050.
Auto Mercado ofrece bolsas reutilizables desde hace 10 años y lanza colecciones especiales desde el 2014. De acuerdo con Pérez-Baires, la meta es llegar a que el 100% de las transacciones se realicen rechazando la bolsa plástica, empacando en bolsas reutilizables.