Un grupo de oficiales que constantemente están combatiendo la minería ilegal, los delitos contra la propiedad y otras actividades ilegales en Crucitas de Cutris, San Carlos, hicieron una pausa esta semana para cumplir una misión muy importante.
Se trataba de hacer más llevadera la constante marcha de los niños y niñas de la escuelita unidocente de Crucitas por entre los embarrialados caminos de esta comunidad fronteriza.
De acuerdo con lo declarado por el comandante Rodrigo Alfaro, subdirector regional de la Fuerza Pública en la frontera norte, como parte de su vocación de servicio a la comunidad, los oficiales siempre están tratando de ir más allá de su función principal de brindar seguridad ciudadana.
Durante los continuos patrullajes por toda la frontera norte, los policías se preocupan por conocer las necesidades de sus habitantes para tratar de ayudar en lo que esté a su alcance o gestionar la colaboración por parte de otras entidades.
Fue así como al observar diariamente a estos esforzados escolares caminar por barreales para poder asistir a clases, optaron por dotarlos de unas buenas botas de hule, pero además de ello, les llevaron artículos escolares y algunos productos alimenticios.
Los oficiales son miembros del Grupo de Apoyo Operacional (GAO) de la Dirección Regional N° 11 de la Fuerza Pública, quienes les demostraron a estos niños y niñas, una vez más, que ellos realmente son sus amigos y pueden contar con su ayuda cuando la necesiten.