La oficial Kristtel Zúñiga Vega, quien labora para la delegación de la Fuerza Pública de Goicoechea, San José, se enteró por las noticias de que en la frontera norte la hermana de un policía ocupaba una silla de ruedas.
Según indicó la oficial Zúñiga, hace unos siete meses su madre había fallecido, tras lo cual dejó una de ruedas en excelente estado, por lo que ella la guardó para donársela a quien la pudiera necesitar. Así que la policía realizó todas las coordinaciones para que los jefes de la Fuerza Pública le dieran permiso de viajar hasta Upala a realizar la entrega de la silla.
Sin embargo, cuando llegó a Upala se enteró de que ya a la niña le habían provisto de una, razón por la cual se dio a la tarea de averiguar quién podía ocupar la silla. Así se enteró de que en Barrio Moreno Cañas de Upala un niño, identificado como Adrián Moncada de 9 años, quien padece de parálisis, estaba urgido de una silla de ruedas.
Zúñiga se desplazó hasta esa comunidad y coordinó con la madre de Adrián, de nombre Francisca Castillo, quien se mostró muy satisfecha con la oficial de la Fuerza Pública por este gesto, que logró dibujarle una gran sonrisa en el rostro de Adrián.
La oficial Zúñiga, quien había salido desde la madrugada del domingo hacia Upala, llegó a Goicoechea en horas de la noche de ese mismo día.
Lo anterior a fin de incorporarse ayer a sus funciones como oficial de guardia de su delegación.