La glándula pineal, también llamada epífisis, es una pequeña glándula endócrina que se encuentra en el cerebro y produce melatonina, hormona que regula los biorritmos del organismo.
Tiene un tamaño de entre 5 y 8 milímetros, y más allá de su función hormonal, es un punto importante para quienes exploran más sobre los misterios del cerebro, ya que existe una conexión con el plano espiritual.
La auto sanación existe pero es fundamental para ello, conocer más sobre esta trascendental glándula, su función y sobre esas cosas con las que podemos afectarla.
Algunas de las funciones más importantes de la glándula pineal son regular el estrés, reforzar el sistema inmunitario, regular los ciclos de sueño y vigilia, regir las funciones endócrinas, y acumular serotonina, «la hormona de la felicidad».
También almacena “energía inmortal”. Sin embargo y un detalle importante es que pese la glándula funciona mejor cuando está activada, es decir, cuando se le ha estimulado conscientemente para desplegar todo su potencial.
Estimularla es vital para vivir bien
De esta manera, estimularla es fundamental para mantener una buena salud corporal y espiritual y se puede hacer de varias formas: haciendo un contacto con la naturaleza, por ejemplo, caminando descalzo sobre el césped y recibiendo baños de sol y de luna.
Además, es recomendado tener las casas iluminadas, oficinas abiertas y cortinas abiertas para recibir la energía del sol y lograr dormir entre 6 y 8 horas como mínimo. Bostezar también estimula la glándula pineal.
Por el contrario, el estrés y los enojos fisuran la glándula pineal, no obstante, el perdón la puede reparar. Lo importante es ser conscientes de que tenemos la capacidad de dañar o mejorarnos a nosotros mismos. Durante estados emocionales de estrés agonía, tensión, oración y meditación la glándula pineal hace un núcleo radiante alrededor del cerebro.
La alimentación también juega un papel importante. A medida que envejecemos la glándula pineal comienza a calcificarse o cristalizarse de manera que se va volviendo lenta: sin embargo, esto varía considerablemente dependiendo de la persona y del estilo de vida que lleve.
El consumo de cantidades excesivas de flúor se considera un factor de riesgo pues se acumula en cantidades altas en la glándula pineal, provocando su calcificación más rápido y también puede reducir la producción de melatonina.
Además, diferentes investigaciones han demostrado que la calcificación de la glándula pineal tiene una fuerte correlación con una dieta cargada de conservantes, azúcar blanco, refrescos, productos químicos y pesticidas.
En la clínica Medicell puede obtener ayuda para activar esta glándula y mejorar así su salud física y emocional.