En el marco de la emergencia nacional contra el COVID-19 y con el objetivo de contribuir con el apoyo y motivación de las entidades que destacan su laborar humanitaria contra el COVID-19, KFC ha logrado donar 220 piezas de pollo a colaboradores del 9-1-1 y el Centro de Rehabilitación Humberto Araya Rojas (CENARE).
De ese total, la franquicia destinó 120 piezas de pollo a las oficinas del 9-1-1 y al equipo de la línea 1322 quienes funcionan 24 horas del día, con el objetivo de atender las llamadas de consultas sobre el COVID-19. Adicionalmente, se donaron 100 piezas de pollo al nuevo equipo de salud del CENARE.
“En KFC estamos comprometidos por velar siempre por la salud y seguridad de nuestra gente. Por eso, seguiremos motivando a quienes cuidan a las personas y los grupos más vulnerables ante la emergencia nacional; nos mantendremos atentos a las oportunidades que necesite el país con el objetivo de contribuir responsablemente desde distintos ámbitos a los cuerpos de apoyo y a las familias en general de Costa Rica” comentó Isidro Perera, gerente general de KFC Costa Rica.
KFC seguirá contribuyendo a las acciones del Gobierno para proteger a los ciudadanos frente al virus COVID-19 y especialmente para cuidar a las poblaciones más sensibles, así como a los colaboradores que tienen como responsabilidad de salvaguardar por su salud. Por ello, la franquicia de comida rápida estará atenta ante cualquier iniciativa.
Medidas de higiene y seguridad contra el COVID-19
Con el propósito de seguir salvaguardando la seguridad y salud de los clientes y colaboradores, KFC continúa aplicando un protocolo de control de infecciones en sus restaurantes, el cual está alineado a lo estipulado por el Ministerio de Salud ante los casos de COVID-19 en el país.
Se invirtió en la compra de termómetros digitales para asegurar que el colaborador esté en perfectas condiciones de salud, se toma la temperatura corporal al inicio y al final de la jornada. Así mismo, se activó un protocolo para todos los servicios exprés. Como medida preventiva se cerrarán temporalmente las áreas de juegos infantiles de los restaurantes para evitar que los niños puedan correr riesgos innecesarios.
En KFC se ha solicitado a los proveedores reforzar y demostrar el cumplimiento de las normas de seguridad alimentaria. Por otra parte, se aumentó los dispensadores de alcohol en gel para la seguridad y tranquilidad de los clientes. Adicionalmente, con el propósito de motivar a las personas a que se queden en su casa, la franquicia hace un llamado para que los clientes utilicen las plataformas digitales como la página web, la aplicación móvil “El Club del Coronel” o sus diferentes canales de distribución de Servicio Express, UberEats, Glovo o Ecommerce que está a disposición del usuario.