El hospital Max Peralta, en Cartago, ya puso a funcionar los seis quirófanos que fueron remozados tras 23 días de arduo trabajo y que permitirán realizar cirugías más seguras para los pacientes de este centro médico.
El proyecto inició con la necesidad de cambiar el piso vinílico de seis salas de operaciones que ya habían cumplido su vida útil, pero creció hasta llegar prácticamente a la remodelación de toda el área de quirófanos, garantizando todas las condiciones sanitarias que aplican en estos casos.
Las autoridades del hospital explicaron que durante el tiempo que duraron las obras los pacientes no vieron interrumpidas sus atenciones porque se habilitaron dos salas para atender cirugías de emergencias y prioritarias como pacientes con diagnósticos oncológicos.
La obras tomaron 23 días y ese tiempo se operaron un total de 125 pacientes en el primer turno en los quirófanos 7, 8 y 9. Además, se contó con el apoyo del hospital Calderón Guardia y del hospital Nacional de Niños para algunos procedimientos quirúrgicos.
El proyecto incluyó:
- Retiro de equipos y limpieza general de las áreas.
- Sellado de aires acondicionados para garantizar su asepsia.
- Remplazo totalidad de pisos vinílicos (293.75 metros cuadrados) de 6 salas de operaciones y pasillo interno reemplazado por pisos epóxicos antibacteriales de alta calidad
- Eliminación de defectos en paredes de quirófanos y pasillos (interno y externo)
- Paredes y cielos embellecidos con pintura especial para áreas clínicas
- Sustitución total de tomacorrientes
- Cambio de tuberías mecánicas deterioradas, tanto de agua potable, agua caliente y desagües
- Mantenimiento preventivo a las instalaciones mecánicas de las piletas y del accionamiento del pedal en las mismas.
- Retorno e instalación de equipos.
- Desinfección total de las áreas.
Aunado a lo anterior el hospital confirmó que están pronto a cambiarse las puertas de las salas 7 y 8 y se incorporó un negatoscopio de cuatro paneles en la sala tres de ortopedia, que fue donado por el hospital San Juan de Dios y sustituye al existente, de inferior capacidad, así como uno de dos paneles para la sala 5.
La ingeniera Lissa Víquez Moreno, jefa del Servicio de Ingeniería y Mantenimiento, comentó que se aprovechó el momento coyuntural para realizar los trabajos por la disminución en la programación de cirugías ante la emergencia generada por el covid-19.
“Cuando la pandemia termine se va a requerir un recurso físico en óptimas condiciones para atender las cirugías y procedimientos pendientes, producto del impase en la programación” comentó la ingeniera.
Víquez destacó el compromiso de su equipo de trabajo, del ingeniero Azofeifa como coordinador de obra civil y mobiliario, de los técnicos de obra civil, eléctricos, aire acondicionado, fontanería y equipo médico, así como de los compañeros del área de gestión de bienes y servicios, el personal de sala de operaciones, Enfermería y servicios generales, quienes tomaron el trabajo como un desafío y en tiempo récord lograron cumplir con los requerimientos planteados con éxito.
El monto de la inversión asciende a 23 millones de colones y fue financiado con recursos del centro hospitalario.
El doctor José Pablo Jiménez Gutiérrez, jefe de sala de operaciones, comentó que el proyecto se venía planificando desde hace algún tiempo con las autoridades del hospital.
“Si bien es cierto la prioridad eran los pisos que ya eran muy antiguos se decidió aprovechar el momento para remozar el resto del área y eso dio la oportunidad de contar con seis salas de operación prácticamente nuevas” agregó el médico.
Los especialistas resaltaron algunos de los beneficios asociados al proyecto:
Buen trato: El paciente recibirá el servicio en un ambiente más atractivo y seguro.
Seguridad: se evitan infecciones intrahospitalarias por el uso de materiales de tipo epóxico, antibacterial, de alta calidad, que propician ambientes más seguros en quirófanos y pasillos (pisos y pintura de paredes).
Productividad: al reforzar la seguridad interna (civil, mecánica, eléctrica, fontanería y equipo médico), se reducen las pausas para hacer arreglos que interfieren con la productividad.
Motivación y salud laboral: al haber un ambiente más propicio para trabajar se previenen accidentes laborales.
El doctor Jiménez se mostró muy complacido toda vez que los cambios van en beneficio de la salud y seguridad de todos los usuarios, que serán operados en un ambiente atractivo y con las medidas sanitarias óptimas.
El jefe de sala de operaciones también manifestó su satisfacción por los empleados a quienes definió como el activo más importante de la institución, porque esto los motiva y les aporta salud laboral. Para el médico, esas 95 personas de diferentes disciplinas, que rotan en tres turnos por las salas de operaciones, merecen estar motivados y seguros en su lugar de trabajo para dar lo mejor de ellos mismos.
En el hospital Max Peralta se realizan cerca de 780 cirugías al mes, solamente en el primer turno.
El hospital recordó que las cirugías que se suspendieron durante la emergencia por covid-19 se podrían ir retomando de manera paulatina, con previo aviso, por lo que hicieron un llamado a la población para que esté atenta a las indicaciones y llamadas del personal del centro hospitalario. Si han cambiado el número de teléfono es importante que lo actualicen en el ebáis de su comunidad, o desde la aplicación del Expediente Digital (EDUS).