La Escuela San Julián, ubicada a 16 kilómetros de Puerto Viejo, en Sarapiquí, logró cumplir con los requisitos establecidos por el Ministerio de Salud para dar inicio al curso lectivo en modalidad híbrida, gracias a una donación de estaciones de lavamanos que realizó la compañía Fyffes, dueña de Finca Frutas de Escocia – Finca Victoria, que se dedica al cultivo de banano en esta localidad.
De acuerdo con su directora, Lidieth Villafuerte, una de las condiciones para volver a abrir sus 4 aulas era colocar pilas suficientes para que los niños pudieran lavarse las manos antes de ingresar, pero carecían de los recursos para hacerlo pues se trata de una comunidad económicamente muy vulnerable. Por esta razón, en coordinación con la Junta de Educación, Fyffes decidió involucrarse y contribuir para que la escuela pudiera iniciar el curso lectivo.
De esta manera, la escuela recibió 5 lavamanos en acero inoxidable con su respectiva instalación y la reparación de la base de un tanque de agua que les había entregado la Comisión Nacional de Emergencias, con lo cual cuenta con agua suficiente para atender cualquier emergencia.
“Sin esa ayuda de las pilas hubiera sido muy difícil que hubiéramos abierto la institución. Como directora, estoy muy agradecida con Finca Frutas de Escocia – Finca Victoria, pues su contribución ha sido fundamental para la continuidad del ciclo lectivo en San Julián”, comentó Villafuerte.
Además, la escuela carecía de material didáctico para sus 196 alumnos, por lo que Fyffes les hizo una donación de útiles escolares que permitió cubrir al 100% de la población estudiantil.
“En Fyffes nos sentimos muy complacidos de poner nuestro aporte para que los niños de la escuela de San Julián pudieran regresar este año a las aulas y continuar sus estudios. Como compañía nos preocupamos por llevar bienestar a las comunidades en las que tenemos operaciones”, indicó Leslie Medina, Gerente General de Finca Frutas de Escocia.