La visita estuvo programada del 13 al 17 de Octubre, con la participación de expertos como la Dra. Tammy White, Directora de Aseguramiento de Calidad de IR-4 y La Dra. Edith Lurvey, Coordinadora de Campo de la Región Noreste del IR-4 de los Estados Unidos, quienes realizaron una inspección de las instalaciones del Laboratorio de Análisis de Residuos de Agroquímicos, del Servicio Fitosanitario del Estado (SFE), así como del equipo de aplicación y bodega de suministros; además realizaron visitas de campo para observar las aplicaciones en los dos primeros ensayos.
El problema que han tenido los productores de especies menores como rambután, chayote, culantro coyote, yuca, entre otros, es que no existen plaguicidas registrados, por tanto tampoco se dispone de Límites Máximos de Residuos (LMR) para plaguicidas en estos cultivos necesarios para su comercialización. En última instancia y para permitir el comercio de estos cultivos, en algunas ocasiones lo que hacen los países importadores es establecer los LMR en los límites de detección de los métodos de análisis.
Según Roger Ruiz, encargado de IR4 en Costa Rica, la respuesta de por qué no se cuenta con plaguicidas registrados para este tipo de cultivos, es porque la industria de agroquímicos tiene poco o ningún interés en registrar plaguicidas porque le representa un alto costo realizar los estudios requeridos y, un poco o nulo retorno económico en la comercialización de plaguicidas para estos cultivos.
El programa bilateral permitirá generar los datos necesarios para solventar la carencia de plaguicidas con usos autorizados en los cultivos que se clasifican como menores.
A través de este convenio se Identificarán las necesidades de manejo de plagas comunes para ambos países; la participar en talleres para el establecimiento de prioridades, conferencias telefónicas y reuniones donde las principales prioridades de plagas son identificadas cuando sea posible.
También se seleccionarán los proyectos prioritarios comunes, determinar los requisitos normativos, realizar ensayos en los dos países para la generación de datos para cumplir con los requisitos reglamentarios o para demostración a los agricultores.
Además, se compartirá la información incluyendo datos regulatorios, planes de estudio, los resultados de detección de plaguicidas, los protocolos de análisis de residuos de plaguicidas, los procedimientos operativos estándar, y otra información que pueda afectar la inscripción de nuevos usos menores de plaguicidas en uno u otro país; y, finalmente trabajar conjuntamente para establecer un registro de plaguicidas similar en ambos países, siempre que sea posible.
En la fase actual se hicieron dos visitas al campo para observar la primera aplicación del primer ensayo en una finca localizada en El Hogar de Guácimo y brindaron capacitación sobre la calibración de equipo de aplicación; así como, la primera aplicación del segundo ensayo en una Finca de Muelle de San Carlos.