Autotoridades anunciaron la creación de la Área Marina de Manejo Barra del Colorado, ubicada en la zona norte de Limón, entre las 7 y las 12 millas del mar territorial y colindante con la frontera marina con Nicaragua.
Con una extensión de 667,82 km², la nueva área protegida permitirá conservar los espacios de tránsito y sitios de reproducción de camarones, langostas, peces, rayas, mantas, tiburones, mamíferos y tortugas marinas. Algunas de estas especies se encuentran amenazadas y en peligro de extinción.
El proceso de creación de la nueva área protegida -que se extendió durante los últimos ocho años- fue liderado por las comunidades vecinas, con acompañamiento del Área de Conservación Tortuguero (ACTo) del Sistema Nacional de Área de Conservación (SINAC) y contó, además, con el apoyo técnico y financiero de de la Asociación Costa Rica por Siempre (ACRXS) y fondos de la Iniciativa Regional de Seguridad para América Latina (CARSI, por sus siglas en inglés) de la Embajada de Estados Unidos en Costa Rica.
Extensión. La nueva área marina de manejo colinda con el Área Marina de Pesca Responsable Barra del Colorado (establecida en 2019), lo que establece un hito, ya que por primera vez, de manera conjunta, serán gestionadas un área marina de manejo (AMM) y un área marina de pesca responsable (AMPR).
Con ese objetivo, se conformó una Comisión Interinstitucional, integrada por SINAC, INCOPESCA, el Servicio Nacional de Guardacostas, la Municipalidad de Pococí y los consejos locales de Barra del Colorado, para la coordinación, gestión integral y gobernanza del AMM y del AMPR, así como la implementación del Plan General de Gestión Compartida y facilitar las acciones necesarias para asegurar la participación social, la conservación, la vigilancia y el aprovechamiento sostenible de los recursos naturales presentes en estas áreas.
Con la creación de esta AMM, se consolida -en el Caribe Norte costarricense- un gran bloque de área protegida, conformado en la parte marina por la nueva AMM, el AMPR Barra del Colorado y el área marina del Parque Nacional Tortuguero. Mientras que, en la zona terrestre, abarca el Parque Nacional Tortuguero y los refugios nacionales de vida silvestre Barra del Colorado y Archi Carr.
El presidente de INCOPESCA, Daniel Carrasco, explicó que mediante la gestión conjunta de las áreas marinas de Manejo y de Pesca Responsable Barra del Colorado, se garantizará seguridad alimentaria, generación de empleos, fortalecimiento de capacidades organizacionales y empresariales de la comunidad, como también el aprovechamiento sostenible de la mano de la conservación.
Logro de la comunidad. El proceso de creación de la nueva área protegida fue liderado por las comunidades vecinas, con acompañamiento del Área de Conservación Tortuguero (ACTo) del Sistema Nacional de Área de Conservación (SINAC), e incluyó el fortalecimiento de plataformas de diálogo y coordinación entre instituciones gubernamentales y grupos organizados de vecinos.
Lilia Briones, presidenta de la Asociación de mujeres peladoras y procesadoras de Barra del Colorado, «como comunidad es muy importante la creación del área marina de manejo para enfrentar el problema del cambio climático, que nos ha afectado bastante. Si nosotros no protegemos todas las especies que tenemos de pesca en Barra del Colorado, va a llegar el momento en que no vamos a tener nada».
Con el apoyo técnico y financiero de la Asociación Costa Rica por Siempre (ACRXS) y fondos de la Iniciativa Regional de Seguridad para América Latina (CARSI, por sus siglas en inglés) de la Embajada de Estados Unidos en Costa Rica, las comunidades establecieron redes de cooperación entre instituciones y grupos comunales para la atención de temas de preocupación local y de seguridad ambiental, lo que permitió fomentar la creación de la Red Comunitaria de Comités Locales de Seguridad y la Red de Emprendedores del Caribe Norte, entre otros.
Este trabajo conjunto se ve fortalecido con la elaboración de un protocolo denominado «Mecanismo de Coordinación Institucional», el cual formalizó el interés general de todos los actores locales por mejorar la comunicación y esfuerzos conjuntos por la seguridad humana y el bienestar del Caribe Norte. Además, se elaboró una Guía de Seguridad Comunitaria para mejorar la atención de este tema en la región.
«Las áreas protegidas son un motor para las economías de las comunidades aledañas que se ven beneficiadas por los servicios ecosistémicos que estas brindan y nuevas oportunidades de negocios. Además, la creación de esta área protegida le permite al país avanzar en las metas de conservación, el aprovechamiento sostenible de los recursos y los compromisos internacionales», indicó Zdenka Piskulich, directora ejecutiva de la ACRXS.