El Ministerio de Salud con motivo del Día Mundial de Prevención del Suicidio entrega por primera vez los datos oficiales para intentos de suicidios y las estrategias para el abordaje de esta epidemia.
Mediante Decreto 37306-S, del 22 de Octubre del 2012, Costa Rica vigila desde el 2013 los intentos de suicido, lo cual lo convierte en uno de los pocos países en América Latina que utiliza la estrategia de notificación obligatoria de los servicios de salud públicos y privado.
“El Ministerio de Salud desempeña un papel importante al proporcionar liderazgo, rectoría y reunir a los interesados directos de otros sectores del país, de manera que despliegue su rectoría en actividades donde haya mayor necesidad o donde ya existan recursos. De ahí la importancia del sistema de vigilancia, el cual nos brinda la información oportuna para que Secretaría Técnica de Salud Mental diseñe las estrategias a poner en práctica para atender a esta población vulnerable”, explica la Dra. María Esther Anchía Ángulo, Viceministra de Salud.
Esta información o datos obtenidos permite caracterizar epidemiológicamente al paciente en tiempo, lugar y persona, con el fin de realizar el análisis de los determinantes de la salud pública y definir estrategias para su abordaje (prevención de la enfermedad y promoción de la salud).
Suicidios 2010-2013
Desde el año 2013 Costa Rica participa en la creación del Observatorio Centroamericano de la Conducta Suicida. Esta plataforma permite a los países hacer un análisis de las tendencias y comportamiento de los suicidios con el fin de definir estrategias regionales en salud pública destinadas a la disminución de este evento.
Como resultados del análisis del país del período 2010 al 2013 hubo un promedio de 318 suicidios por año, de los cuales el 85,8% fueron hombres.
En cuanto al lugar del hecho, en ambos sexos, en el cual ocurren los suicidios, el 51,57% ocurrieron en la vivienda; y de acuerdo al método utilizado el 58,8% corresponde a ahorcamiento; y el mes de setiembre es en el que ocurren más suicidios con un 9,9% del total de suicidios en ambos sexos.
En cuanto al día de ocurrencia de los suicidios, los fines de semana, de viernes a domingo, se presenta el mayor porcentaje con un 47,35 %.
Los intentos de suicidios 2014
Con respecto a los intentos de suicidio notificados al Sistema de Vigilancia de enero a agosto de 2014, ocurrieron 625 casos, de los cuales el 59,2% son mujeres. Los grupos de edad con mayor porcentaje son los de 15 a 24 años edad con un 34,84% del total.
Las Regiones Central Sur y Central Este registral el 52,64% del total de casos; mientras en provincias de residencia del paciente San José y Cartago notifican el 55,68% de casos.
Asimismo, los 10 cantones con mayor número de casos son Cartago (50), Vásquez de Coronado (45), San Ramón (42), Goicoechea (36), Pococí (31), Paraíso (24), Oreamuno (24), Liberia (22), Pérez Zeledón (19) y Puriscal (17).
Las estrategias de abordaje
Para el abordaje del tema de intentos de suicidios, la Secretaría Técnica de Salud Mental propone tres clases de estrategias para contrarrestar los factores de riesgo.
La prevención “universal”, diseñadas para llegar a toda una población, pueden procurar aumentar el acceso a la atención de salud, promover la salud mental, reducir el consumo nocivo de alcohol, limitar el acceso a los medios utilizables para suicidarse o promover una información responsable por parte de los medios de difusión.
Seguidamente, las estrategias de prevención “selectivas” que se dirigen a grupos vulnerables, como los de quienes han padecido traumas o abuso, los afectados por conflictos o desastres, los refugiados y migrantes y los familiares de suicidas, mediante “guardianes” adiestrados que ayudan a las personas vulnerables y mediante servicios de ayuda como los prestados por líneas telefónicas.
Finalmente, las estrategias “indicadas”, las cuales se dirigen a personas vulnerables específicas mediante el apoyo de la comunidad, el seguimiento a quienes salen de los establecimientos de salud, la capacitación del personal de salud y una mejor identificación y manejo de los trastornos mentales y por uso de sustancias. La prevención también puede desarrollarse fortaleciendo los factores protectores, como relaciones personales sólidas, un sistema personal de creencias y estrategias de afrontamiento positivas.
“Las estrategias, de manera general, abarcan varias medidas de promoción y prevención como: la vigilancia, promover los factores protectores, la restricción de los medios utilizables para autoeliminarse; además de las directrices para los medios de difusión; la reducción del estigma y la concientización del público; así como la capacitación de personal de salud y educadores. Dichas estrategias serán trabajadas en el seno del Consejo Nacional de Salud Mental para poder operativizar las respuestas a esta problemática de salud pública”, concluye el Dr. Allan Rímola Rivas, director de la Secretaría Técnica de Salud Mental.