La construcción de dos viaductos de 800 metros que conectarán la ruta 257 de Terminal de Contenedores de Moín con la ruta 32 entre San José y Limón se llevó a cabo con una solución amigable con el ambiente para resolver el cambio de nivel entre la ruta aérea y la calzada inferior.

De acuerdo con Oldemar Bermúdez, Presidente de la Asociación Costarricense de Geotecnia (ACG), “los extremos de estos viaductos poseen rellenos de aproximación hechos con muros de suelo reforzado con el sistema Terramesh Verde de Maccaferri aprovechando el ambiente natural que cubre toda la zona” que; además, de respetar el entorno paisajístico cumple con las exigencias de una ruta que tendrá alto tránsito pesado de contenedores hacia el puerto.

El caso de esa solución se conoció durante la edición 2018 del XIII Congreso Nacional de Geotecnia 2018 (CONGEO) que se llevó a cabo entre el 5 y el 6 de setiembre en el Hotel Wyndham Herreadura.

La actividad, fue convocada por la ACG reunió a 300 expertos de Estados Unidos, Brasil, Venezuela, Cuba, Centroamérica y Costa Rica quienes; además, de los temas relacionados con las rutas áreas presentaron otros casos como construcción de obras de infraestructura (represas), rutas de montaña y prevención de riesgos en carreteras.

“Casos como el desarrollado en Moín nos demuestra que la geotecnia es una disciplina que está muy avanzado en Costa Rica si la comparamos con el resto del área. Por supuesto, todavía nos falta bastante para llegar al nivel de países como México, Colombia o Brasil, sin embargo, podemos decir que tenemos un recurso altamente capacitado y con un buen manejo de las tecnologías de avanzada como se demostró en el Congreso”, indicó Bermúdez.

Tecnología local. La Terminal de Contenedores de Moín es el mayor proyecto de infraestructura de la historia de Costa Rica y pretende ayudar a la creciente industria de las exportaciones agrícolas del país, así como también a su activo sector manufacturero.

Para conectar ese gran proyecto a la red vial existente fue necesario crear la Ruta Nacional 257 que se unirá con la Ruta 32. La vía 257 se plantea como una vía de alta capacidad, con dos viaductos, de aproximadamente 800 metros cada uno.

“Los rellenos de aproximación fueron realizados con rellenos reforzados, cuya fachada es amigable con el ambiente, y para que en el futuro puedan vegetarse con mayor facilidad”; además, “la fachada verde favorece el crecimiento de la vegetación en la superficie, lo cual constituye un proyecto amigable con la naturaleza”, explicó Bermúdez quien durante el Congreso presentó el trabajo “Muros con fachada verde en rellenos de aproximación a puentes, Proyecto Terminal de Contenedores de Moín”.