No importa la escuela que se visite en cualquier lugar del país. Todas ellas están decoradas con imágenes de niñas, niños o adultos que igual podrían estar decorando una escuela en Suecia o en Holanda: son personajes con poca identidad, muy parecidos entre sí… y muy distintos y ajenos a la diversidad que encontramos en nuestras escuelas, en cada rincón del país.
Para cambiar esto y propiciar una decoración que sirva también un propósito educativo y que refleje la rica diversidad nacional, el Ministro de Educación Pública, Leonardo Garnier, presentó el jueves anterior “La unidad de lo diverso”, una amplia colección de imágenes que recrean personajes -niños y adultos- así como efemérides, paisajes y estructuras contextualizados en los ambientes costarricenses.
Según explica Garnier, a lo largo de estos años ha “recorrido las escuelas del país de extremo a extremo y sin importar dónde estuviera -en Pavas o en Upala, en Heredia o en Santa Cruz, en Talamanca o en San Carlos- siempre observó la gran diversidad que nos caracteriza: estudiantes altos y bajos, más gorditos o delgados, chiquillas pecosas y morenitas, pelos negros, rubios, castaños o pelirrojos, lacios o colochos, ojos verdes, café, negros o celestes; sin importar dónde, siempre fue así”, puntualiza.
Por eso, dice, el fin de esta iniciativa es que los centros educativos -en particular los de preescolar y primaria- utilicen imágenes con las que estudiantes y docentes realmente se puedan identificar, y que sean tan diversas como ellos mismos.
“Si queremos aprender a convivir como somos, hermosamente diversos, es necesario que también sean diversas las imágenes con que nos representamos”, enfatiza el jerarca.
Además, acota, la intención detrás de estas imágenes trasciende lo meramente estético. El propósito es que también sean parte del esfuerzo más amplio asumido durante su gestión de entender que la interculturalidad va de la mano con el tema de fondo de cualquier proceso educativo: la construcción de identidad de nuestros niños y adolescentes.
En el acto, que tuvo lugar en la Escuela Rafael Francisco Osejo, en Sabana Sur, Garnier externó su agradecimiento a la ilustradora nacional Vicky Ramos, quien les asesoró en todo el proceso y, en particular, a Dilcia Muñoz, la dibujante que trabajó y desarrolló la colección. También a los patrocinadores del proyecto: la Asociación de Empresarios para el Desarrollo (AED), el Grupo ICE, BAC-Credomatic y Avon.
Muñoz y Garnier suscribieron el convenio mediante el cual la artista cede al MEP sus derechos de autora, razón por la cual toda la obra queda liberada para su uso y reproducción gratuita por parte de la comunidad educativa, incluidas las empresas privadas que hoy deben pagar cánones por la comercialización de las imágenes importadas que ofrecen al público.
CONOZCA LA COLECCIÓN
Toda la colección está disponible en: http://www.mep.go.cr/programas-y-proyectos/unidad-de-lo-diverso