Por primera vez, Cargill Costa Rica recibió el pasado 3 de junio, la Bandera Azul Ecológica en la Categoría de “Cambio Climático”, gracias a los esfuerzos realizados en el taller de mantenimiento y en su flotilla, una de las más grandes del país.
Las áreas evaluadas por la Comisión Nacional de Bandera Azul, en esta categoría, fueron: combustibles fósiles, agua, energía eléctrica, gestión de residuos, contaminantes atmosféricos, compras sostenibles, adaptación y educación ambiental.
Algunas de las iniciativas que hicieron posible este galardón requirieron de una inversión importante de parte de la empresa, con el fin de fortalecer una operación más amigable con el ambiente y, a la vez, generar un ahorro.
“En Cargill contamos con metas ambientales, con miras a lograr una operación eficiente. Es así como este reconocimiento nos llena de emoción, pues evidencia que nuestros esfuerzos para constituir una operación sostenible han dado los réditos esperados. Ahora nos toca seguir trabajando para mantener y mejorar estas métricas y lograr los objetivos que nos hemos propuesto de aquí al 2020”, manifiesta Gilberto Quesada, Gerente General de Cargill Costa Rica.
Iniciativas a favor del ambiente
En el rubro de combustibles fósiles, Cargill redujo la edad promedio de la flotilla (pasó de 12 a 6 años, en el 2012), lo cual implicó una inversión de US$12 millones para renovar el 75% de los vehículos. Además, la empresa desarrolló una campaña interna para enseñar técnicas para un manejo eficiente, a 120 conductores del Gran Área Metropolitana. Para este año se espera capacitar a más choferes sobre este tema.
En este apartado también destaca la adquisición, en noviembre del año pasado, del primer camión híbrido de Centroamérica, el cual combina de forma inteligente un motor eléctrico con uno Turbo Diesel de 4.000 centímetros cúbicos. Con este vehículo se espera un ahorro del 30% de combustible y una disminución de emisiones de óxidos de nitrógeno del 28%, de dióxido de carbono del 35 % y de partículas de hollín del 80%.
Dentro de las iniciativas relacionadas con la energía eléctrica, cabe resaltar la instalación de 15 lámparas led en el taller, lo cual significó una inversión de ȼ4 millones y un ahorro promedio en la factura de consumo eléctrico de entre un 15% y 20%.
Para apoyar los esfuerzos por reducir los contaminantes atmosféricos, Cargill también ha realizado una inversión de US$3 millones, en los últimos 4 años, para cambiar 175 equipos de refrigeración, los cuales cuentan con características más modernas y más amigables con el ambiente.
Otro aspecto que también fue considerado durante la evaluación es que Corporación PIPASA S.R.L. cuenta con 237 hectáreas de bosque protegido que representa un sumidero de CO2. Este proyecto se le llama “Ecogranja”, ya que se encuentra dentro del terreno donde se tienen las granjas.
Adicionalmente, existe un programa de gestión de residuos ordinarios, peligrosos y de manejo especial. Al ser un taller mecánico, la gestión de residuos peligrosos y especiales es muy importante, por esta razón se trabaja con gestores autorizados y a través de convenios con proveedores. Solo en el último año se han desechado de forma responsable: 247 llantas, 320 baterías viejas y 7.318 kilos de aceite usado, entre otros.
De esta forma, la Comisión Nacional de Bandera Azul determinó que estas, junto con otras iniciativas que se desarrollan a lo interno, contribuyen a compensar el impacto ambiental de la organización, por lo que se otorgó dicho galardón.