La campaña permanente de recolección de llantas que se realiza en las estaciones de Riteve logró sacar de circulación durante el 2020 un total de 44.581 llantas usadas, equivalentes a más de 790 toneladas de material que ya no va a representar nunca más un peligro para la salud y el ambiente. Estas llantas fueron co-procesadas para convertirlas en combustible alternativo, con lo cual se logró evitar que más de 1.643 toneladas de emisiones de dióxido de carbono (CO2) fueran lanzadas al ambiente.

Desde que la campaña inició en junio de 2018 se han recuperado un total de 81.908 llantas que luego de ser gestionadas adecuadamente han sumado un aproximado de 3.140 toneladas de emisiones de dióxido de carbono (CO2) evitadas.

“Estamos realmente satisfechos con los resultados que año con año genera esta campaña y por el impacto tan grande que esto representa en áreas como la salud y el ambiente. Es además un gran aporte al objetivo común de la descarbonización Nos enorgullecemos en mostrar un caso exitoso de Alianza Público-Privada en la que la unión de instituciones y empresas aliadas logra maximizar resultados.”, comentó Jennifer Hidalgo subgerente de Comunicación y Responsabilidad Social de Riteve.

Esta iniciativa que se desarrolla en alianza entre Riteve y Fundellantas cuenta con el aval del Ministerio de Salud y el Ministerio de Ambiente y Energía, así como con el apoyo del programa Ecoins, Cemex y el Colegio Federado de Ingenieros y Arquitectos (CFIA).

«Nuestra misión en Fundellantas es garantizar formas innovadoras de dar un tratamiento responsable a las llantas de desecho y en alianza con Cemex brindamos una solución ecoeficiente a la problemática ambiental y de salud pública relacionada con las llantas en desuso generando una industria baja en carbono que contribuye con el plan de descarbonización del país mitigando el impacto de la contaminación y del cambio climático», indicó Elsie Alvarez, directora ejecutiva de Fundellantas.

«Agradecemos a Riteve, Fundellantas y demás colaboradores por sumar esfuerzos en esta iniciativa que ha sido tan exitosa, en ella se combinan tres elementos fundamentales: una alianza público privada, la implementación de la responsabilidad extendida del productor que establece la Ley para la Gestión Integral de Residuos por parte del sector llantero y sobre todo una contribución muy importante en las metas del plan de descarbonización. Todos podemos contribuir con esta meta país», destacó el Viceministro de Energía y Calidad Ambiental del MINAE, Rolando Castro Córdoba.

Actualmente la campaña comprende cinco puntos de recolección en las estaciones de Riteve ubicadas en Heredia, Cañas, Puntarenas, Guápiles y San Carlos. Además, mediante un convenio con el Colegio Federado de Ingenieros y de Arquitectos (CFIA), los últimos jueves y viernes de cada mes, se instala un punto de recolección en esta entidad, para facilidad de los vecinos de la zona este de la capital. En todos los puntos de recolección de esta campaña, las llantas pueden ser canjeadas por puntos del programa Ecoins.

“Una llanta de desecho se convertirá casi con total seguridad en un Hotel 5 estrellas para la reproducción de este mosquito. Aedes aegypti es el principal trasmisor de Dengue, Zika y Chikungunya en el país. Si somos capaces de eliminar las llantas de desecho en las estaciones de Riteve u otros entes autorizados le estamos dando un golpe mortal al mosquito Aedes aegypti y a las enfermedades que trasmite”, comentó el Dr. Rodrigo Marín coordinador de control de vectores del Ministerio de Salud.

Según la especialista ambiental Rosario Alfaro, las llantas tienen varios componentes químicos que impactan negativamente el ambiente sino se gestionan adecuadamente, de ahí que la recolección de llantas y su posterior tratamiento traen múltiples beneficios a la sociedad.

La gran mayoría de llantas recolectadas este año en esta campaña fueron co-procesadas con equipos de última tecnología que pone a disposición la compañía Cemex y mediante los cuales se logra transformar todo ese material en combustible alternativo para la industria cementera.

Toda esta cadena de esfuerzos se realiza sin fines de lucro, gracias a los compromisos de Responsabilidad Social de cada una de las empresas e instituciones aliadas.

• La buena gestión de las llantas…
• Reduce las emisiones de dióxido de carbono, que es el principal gas de efecto invernadero responsable del cambio climático.
• Evita el desarrollo de incendios incontrolados por la acumulación de estos materiales en lotes desatendidos.
• Evita la afectación a los ríos, pues dada la alta toxicidad del zinc, un neumático en el agua es sumamente nocivo para la fauna acuática.
• Evita la reproducción y presencia de mosquitos portadores de enfermedades como el dengue, chikungunya y zika, a consecuencia del estancamiento de las aguas. También se evita la concentración de animales roedores.
• Evita la contaminación de las fuentes de agua. La quema de neumáticos en las orillas de un río genera: residuos aceitosos que contaminan las aguas, excediendo los valores máximos de metales establecidos por la normativa ambiental para los diferentes destinos del agua (uso humano, doméstico; agrícola, pecuario y recreativo).
• Evita problemas de salud ya que las llantas tienen plomo, acero y cadmio, que son dañinos a la salud humana y la quema de las mismas emite al aire contaminantes que atacan al sistema respiratorio, dando lugar a la aparición inmediata o progresiva de enfermedades bronco-respiratorias, asma, e incluso cáncer; afecciones a la piel, afecciones cardíacas, y los ojos.
• Reduce el deterioro del entorno y el paisaje.
• Reduce los gastos hospitalarios y el porcentaje de enfermos: Según la especialista ambiental Rosario Alfaro hay estudios que estiman entre 500.000 y 1.300.000 de colones el costo promedio de atención hospitalaria por persona con problemas respiratorios, cardíacos, asma, entre otros, afectados por la contaminación del aire.