Desde el sexto piso en un apartotel ubicado en Budapest, Hungría, el judoca costarricense Ian Ignacio Sancho se recupera de la operación del ligamento roto anterior cruzado de su pierna derecha que le trunco el 2014, no así su deseo de volver en seis meses al tatami de competencias.
“Ya camino solo, sin ocupar muleta, hago terapia tres veces al día –mañana tarde y noche–en este mismo hotel donde me dan las comodidades para sobresalir de la operación. El mismo doctor Beres Gyorgy, quien me operó viene y me alienta de que voy mejor día a día”, comentó Ian Ignacio desde su cama desde donde puede ver todos los días la catedral cuya vista la describe como “muy bonita”.
La lesión de Sancho suscitó cuando competía en el Grand Slam de París, el pasado 08 de febrero, cuando en su primera competencia no pudo continuar por el dolor tan fuerte en su rodilla derecha. De inmediato se le efectuaron los exámenes y se dictó que el tico fuera trasladado rumbo al Hospital de Tata en Hungría, en el cual el doctor Beres Gyorgy le efectuaría una excelente cirugía.
Desde entonces, ya casi ha pasado un mes y para el tico “todos los días parecen iguales”, pero no pierde la fuerza para cumplir la rehabilitación.
“Hago exactamente lo mismo, fortalecimiento por la mañana en la tarde y en la noche. La idea es ganar además flexibilidad y sé que pronto me darán de alta para regresar a Costa Rica donde voy a continuar con la terapia y estar pura vida para lo que venga sobre el tatami de competición”, destacó el alajuelense.
Ian Sancho estaba entrenando en Uzbekistán merced a una beca deportiva de un año que le otorgó la Federación Internacional de Judo.
“Sé que hay que tener mucha paciencia, me dijeron que serían tres mes tres meses en actividad física y seis para volver a practicar judo. Ya falta menos que antes y sé que voy a estar mejor cada día”.
Por ahora gusta de leer artículos deportivos por internet, hablar con su familia en Alajuela, amigos y dirigentes de su federación y el Comité Olímpico de Costa Rica, ver noticias por televisión (CNN), donde por supuesto las informaciones ticas no pueden faltar.