Hombres y mujeres musculosos brindando instrucciones en un gimnasio, esa es una imagen frecuente. Sin embargo, se ha preguntado usted cuál es el curriculum de ese instructor y cuáles referencias laborales tiene más allá de su cuerpo estilizado?
Una resolución del Ministerio de Salud busca garantizar a la ciudadanía la capacitación y profesionalización de las personas que tienen a cargo un gimnasio, por eso ahora deben contar con un regente en Terapia Física (fisioterapeuta).
La ley que establece esta normativa es del 2007, pero nunca se hizo respetar, por eso hasta hoy cualquier persona con formación empírica dentro de un gimnasio se convertía en instructor o entrenador personal.
Contrarrestar este tipo de servicio inadecuado y poco profesional, es lo que pretende dicha resolución. “El Colegio de Terapeutas velará por el debido cumplimiento de esta resolución, ya que la salud e integridad de las personas no es un juego, más bien instamos a toda la población en general a consultar si al sitio que visitan cuenta con un profesional debidamente incorporado a nuestro colegio profesional, lo que le dará a su vez un respaldo de que ese terapeuta se encuentra a derecho para ejercer legalmente la profesión y con el tiempo eliminar por completo el ejercicio ilegal y el empirismo”, resalta el fiscal del Colegio de Terapeutas de Costa Rica, el Dr Xavier Herrera Xirinachs.
Fisioterapeutas en Asilos de Ancianos
Esta resolución también aplica para los asilos de ancianos, los cuales deben contar con un fisioterapeuta. En estos centros el papel de los terapeutas es primordial para el sano desarrollo e integridad de nuestros ciudadanos de oro.
Así lo explica el fiscal del colegio “El profesional en Terapia Física es de vital importancia, ya que dentro de las múltiples funciones que puede desempeñar con esta población meta, se encuentran: mantener la funcionalidad del adulto mayor en los ámbitos de actividades diarias, recreativas y lúdicas; promover a través de la actividad física mejores niveles de salud a nivel físico, mental y emocional. Así como la intervención directa de las lesiones o secuelas de enfermedades agudas y/o crónicas que pueda presentar”.
Es importante saber que no sólo el adulto mayor, sino que cualquier persona se expone a múltiples riesgos, si es tratado por una persona que no sea especialista en salud. Por eso el Colegio de Terapeutas hace un llamado a la ciudadanía para que sea el primer fiscalizador de la capacitación de las personas en quien confía su salud.
Denuncias
El Colegio creado en el 2011 cuenta con un departamento legal y de fiscalía que se encarga de llevar los procesos en contra de personas que ejercer ilegalmente la profesión, así como a los terapeutas que cometen una falta durante su práctica profesional.
“El Colegio solicita a la población consultar si la persona que le atenderá se encuentra titulado e incorporado. Posterior se iniciará un proceso paulatino en donde se le comunique a los diferentes establecimientos o empresas sobre esta resolución del Ministerio de Salud, entre otra serie de acciones”, concluye Herrera.