El pasado 1 y 3 de marzo, el Teatro Nacional de Costa Rica recibió a la Orquesta Sinfónica Nacional, en el estreno de la Temporada Oficial de Conciertos 2013, de la mano del director emérito Irwin Hoffman, quien por quince años se mantuvo al frente de este ensamble nacional como su director titular, y quien será encargado de cerrar con broche de oro la Temporada 2013, como director invitado del XII Concierto en noviembre.
Guillermo Madriz, director del Centro Nacional de la Música (CNM), afirma que “el maestro Hoffman hoy día es una leyenda viva en la música clásica y en la dirección de orquestas. Él guarda un gran cariño y respeto por parte de los músicos. Es un director que reside en el país y que tiene una experiencia de más de sesenta años, por lo que nos pareció la persona idónea para iniciar la temporada 2013. No aprovechar sus cualidades y condiciones sería absurdo”, concluye el director.
Según informó el CNM, Hoffman, quien nació en Nueva York y actualmente acumula 87 años de edad, comenzó sus estudios musicales de violín y piano a la edad de seis años. Posteriormente realizó estudios completos como violinista y director en la Juilliard School of Music.
Durante los veranos, cursó estudios con Serge Koussevitzky, en el Berkshire Music Festival; y además se le otorgó el título de doctor de Música Honoris Causae, por la Universidad de Tampa en Florida.
Como director titular, estuvo al frente de la Orquesta Sinfónica de Colombia en tres temporadas a partir del 2000. Al mismo tiempo, fue director titular de la Orquesta Sinfónica Nacional de Costa Rica desde 1987, con la que realizó giras por Florida, Estados Unidos; Hungría, Checoslovaquia, Alemania y España.
En Chile fue director titular de la Sinfónica de Santiago, a partir de 1994. En su país natal, fue director artístico del Festival de Flagstaff, en Arizona, desde 1983 hasta 1996.
Como director invitado estuvo al frente de orquestas del mundo como la Sinfónica de la BBC, de Inglaterra, Gales y Escocia; la Nueva Filarmónica de Londres; en Francia, la Orquesta Nacional de la ORTF; la Sinfónica Francesa de París y la Sinfónica de la Radio de Estrasburgo. En Canadá, dirigió las orquestas de CBC de Toronto, Winnipeg y Kitchener. En Israel, la Filarmónica de Israel y la Orquesta de Cámara Israelita. En Hungría la Orquesta Sinfónica de MAV. En Serbia, la Filarmónica de Belgrado.
En Estados Unidos dirigió las orquestas de St. Louis, Pittsburgh, Dallas, Denver, New Jersey, Honolulú, Phoenix, Buffalo, New Orleans, Grant Park y Ravinia Festival. En el Oriente la Orquesta Sinfónica de Beijing, China; en Taiwán las Orquestas Sinfónica de Taipei y Taichung.
A continuación las apreciaciones de Hoffman con respecto a su carrera junto a la OSN y sobre su trabajo para la Temporada Oficial 2013.
-¿Cómo ha sido su vinculación con la Orquesta Sinfónica Nacional?
Por quince años fui director titular de la OSN. En esa época obviamente los músicos eran más jóvenes, y yo también. He tenido el honor de desarrollar a los músicos hacia una orquesta, de la que creo que el país puede sentirse muy orgulloso, por este instrumento de cultura. Terminé mi trabajo como titular en el 2002, después de quince años, y por diez años no dirigí la Orquesta hasta hace un año y medio, cuando el Ministerio de Cultura y Juventud, a través de la OSN, me invitó a dirigir algunos conciertos, con lo que estuve muy contento de renovar mi relación con la Orquesta.
-¿Qué lugar ocupa la OSN en su vida?
La Orquesta tiene un lugar muy especial en mi corazón, primero porque estoy casado con una costarricense y porque siempre me ha interesado la cultura costarricense.
Ahora dirijo fuera del país. Este año por ejemplo, dirigiré algunos meses en Colombia, donde fui director titular de la Sinfónica Nacional y la Filarmónica. Además, dirigiré algunas otras orquestas como invitado en Beijing y Budapest, pero dirigir en Costa Rica es para mí muy especial; conozco muy bien a los músicos y sus temperamentos; así como al país y sus eventos culturales.
Nosotros vivimos en las montañas un poco afuera de San José, todos los días puedo ver el país desde nuestra casa y no obstante, donde yo vaya a dirigir, la Orquesta Sinfónica de Costa Rica es una gran parte de mi vida.
-¿Cuál es su impresión como director emérito, elegido para abrir y cerrar la Temporada Oficial 2013 de la OSN?
Cuando la Orquesta me pidió que abriera la Temporada 2013, y además la cerrara en noviembre, fue un gran honor y he aceptado con mucho placer. Los músicos han seleccionado nuestro repertorio, el cual atraerá mucha gente, por ser un material clásico, pero popular como Rachmaninov y La Sinfonía No. 9, o la Sinfonía del Nuevo Mundo, que es bien conocida, pero que hace muchos años que no se toca, porque se pensaba que por ser muy popular, era mejor otro repertorio, pero seguramente al público le va a gustar.
-¿Cómo califica su experiencia en la dirección del pianista invitado Alexander Korsantia, para el I Concierto Oficial 2013?
Tocamos juntos hace diez años con la Orquesta Sinfónica Nacional de Colombia; en esa ocasión fue el tercer concierto de Rachmaninov. Es muy fácil tocar con él, porque es una persona profundamente musical, humilde, con mucha voluntad para colaborar y que busca lo mejor en la música. Hemos intercambiado nuestras ideas sobre el concierto.