¿Sabía usted que las enfermedades infecciosas de causa bacteriana como el Helicobacter pylori (Hp) pueden provocar úlceras, dispepsia e incluso cáncer gástrico? El tratamiento de estas infecciones requiere atención con antibióticos, que deben ser acompañados con probióticos como el Saccharomyces boulardii CNCM 1-745, una levadura natural no modificada genéticamente, que optimiza los planes de tratamiento.
El uso de los antibióticos puede causar efectos secundarios como náuseas, flatulencias y diarrea, por eso el llamado de los expertos es a proteger la microbiota intestinal -conocida como flora intestinal-.
“Tenemos miles de millones de bacterias en todo nuestro cuerpo, también tenemos virus y hongos, e incluso parásitos en el intestino, eso es normal y es bueno. Pero el uso indiscriminado de los antibióticos produce cambios en la microbiota que suceden desde edades tempranas, y esta modificación puede combatirse de varias maneras: con una dieta saludable y adecuada, así como con el uso de probióticos, que son sustancias que se utilizan para modificarla de una manera positiva”, explicó el Dr. Henry Cohen, experto internacional en Gastroenterología.
¿Pero, qué es el Helicobacter pylori?
La bacteria Helicobacter pylori (Hp) es la responsable de una de las principales infecciones bacterianas crónicas en seres humanos, que al alojarse en el estómago puede causar gastritis crónica, úlceras e incluso cáncer gástrico. Se cree que esta bacteria se adquiere en edades tempranas de la niñez -generalmente cuando los pequeños entran al kínder-, aunque sus complicaciones se ven mucho tiempo después, ya en edades adultas.
Según diversas estimaciones, la infección por esta bacteria afecta al 50% de la población latinoamericana, y en nuestro país la prevalencia es de aproximadamente el 60%. Debido a que en Costa Rica hay una alta incidencia de cáncer gástrico, es clave erradicar esta bacteria en personas con riesgo a desarrollarlo, impulsando estrategias terapéuticas que ofrezcan altas tasas de eliminación del microorganismo, minimizando así los efectos adversos.
Según los especialistas, para erradicar el Helicobacter pylori (Hp) se requiere de al menos dos antibióticos, los cuales la mayoría de las veces no son tolerados por los pacientes ya que producen náuseas, vómitos y diarrea asociada al uso de este medicamento.
“Recordemos que es de vital importancia tomar el tratamiento completo, ya que de lo contrario no se logrará la erradicación de la bacteria. Se han realizado muchos estudios clínicos en los que se ha comprobado que asociar el Saccharomyces boulardii CNCM 1-745 junto con la terapia de erradicación mejoran la adherencia del tratamiento y las tasas de eliminación de la bacteria”, indicó Gastroenteróloga Dra. Carolina Sánchez, miembro de la Asociación de Gastroenterólogos de Costa Rica.
Saccharomyces boulardii CNCM I-745: el probiótico número uno del mundo
Los expertos subrayaron que el tratamiento con Saccharomyces boulardii CNCM I-745 contribuye positivamente a lograr el objetivo, ya que además de incrementar la tasa de erradicación de Helicobacter pylori (Hp), ha demostrado una alta eficacia en la disminución de efectos asociados tanto a la infección como a la terapia erradicadora, como pueden ser dolor e hinchazón abdominal, diarrea y desórdenes de sabor, entre otros.
El Saccharomyces boulardii CNCM 1-745 es una cepa de levadura tropical, aislada por primera vez de las frutas del lichi y del mangostán en 1923, por el científico francés Henri Boulard.
“Esta levadura probiótica es muy útil en determinadas patologías, se puede utilizar al mismo tiempo que los antibióticos, por lo cual es buena para prevenir la diarrea tan común asociada al uso de estos medicamentos. Además, se puede usar en la prevención de efectos secundarios del tratamiento de la infección por Helicobacter pylori (Hp)”, expresó el Dr. Cohen.
“El Saccharomyces boulardii CNCM 1-745 ayuda a evitar los efectos secundarios de los antibióticos, fundamentalmente la diarrea, pero también disminuye las náuseas. El uso adecuado de estos probióticos permite una reconstitución más rápida de la microbiota intestinal de los pacientes, lo que ayuda a recuperar las funciones digestivas y a cumplir el tratamiento antibiótico que puede verse interrumpido debido a las molestias”, puntualizó el especialista Dr. Cohen.