La Cooperativa de Electrificación Rural Los Santos (Coopesantos R.L.), invierte más de $10 millones en un ambicioso programa de protección al ambiente, cuyo objetivo es apostar al desarrollo sin descuidar la naturaleza.
Es un programa positivo partiendo de que, a pesar de la inversión, no impactará en tarifas, ya que se pagará con el ahorro que las distintas obras les producirán a la cooperativa y consumidores.
El plan comprende al menos cinco acciones que van desde la protección de cuencas, medidores inteligentes para evitar el desperdicio, el uso de luminarias y de paneles solares en espacios públicos y edificios de la cooperativa, así como la protección del cableado para evitar que los animales se electrocuten.
“Tenemos un compromiso verde orientado a la sostenibilidad; estamos en una zona donde existe un parque nacional, área silvestre protegida, máxime que tenemos en nuestra región una comunidad emblema de la biosfera a nivel mundial, como lo es San Gerardo de Dota”, destacó Mario Patricio Solís, gerente general de Coopesantos.
La protección al recurso hídrico es uno de los programas más representativas y comprende la compra de propiedades donde se encuentran las nacientes y acuíferos para que los gobiernos locales y asociaciones de acueductos las cuiden y así garantizar el suministro para siguientes generaciones.
En la línea verde también se están sustituyendo los medidores electromecánicos por dispositivos inteligentes que le permita a los ciudadanos monitorear el consumo desde su aparato celular y así moderar el consumo el caso de que registre un repunte. Este plan va enmarcado en la eficiencia energética y en la línea del programa de descarbonización, destacó Solís.
Así se invertirán cerca de ¢4 mil millones, financiados por los bancos Popular y Nacional, para la sustitución del 100% de los abonados actuales y se dejan previstos unos dispositivos adicionales para incluir a los futuros asociados.
Para las comunidades donde no hay electricidad se apostará por luminarias solares; por ahora el plan comprende 20 lámparas, pero se irá ampliando hacia zonas inseguras justamente por la falta de iluminación. Igualmente se colocaron paneles solares en los edificios de la cooperativa para su autoabastecimiento.
La protección de la fauna es otro componente del programa e involucra el blindaje del tendido eléctrico para evitar que animales se electrocuten. Para ello se están cubriendo con silicón los cables y otros equipos que ponen en riesgo a los animales que frecuentan desplazarse por ellos como ardillas, roedores, perezosos y zarigüeyas.
Coopesantos atiende a unos 150 mil ciudadanos de los cantones de Dota, Tarrazú, León Cortes y Acosta, así como parcialmente a los abonados de los cantones de Mora, Desamparados, Aserrí, Cartago y El Guarco.