En octubre, Pozuelo conmemora dos fechas mundiales de especial interés dentro de su programa de sostenibilidad. Se trata del “Día Mundial de la Alimentación”, celebrado el 16 de octubre y el “Día Internacional para la Erradicación de la Pobreza”, celebrado cada 17 de octubre.
Bajo el propósito de reducir la vulnerabilidad en niños en riesgo social, solo en el 2018, Pozuelo ha donado cerca de 90 toneladas de su producto. El esfuerzo forma parte del Programa de Responsabilidad Social Empresarial de Pozuelo, denominado “Construyendo juntos”. Una iniciativa que lleva varios años ejecutándose en búsqueda de generar mejores condiciones de vida para esta población.
Desde “Construyendo Juntos”, Pozuelo ha desarrollado también varias acciones enmarcadas dentro de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) con metas claras al 2030. En este sentido, Nathalia Vélez, directora de Innovación y Sostenibilidad de Pozuelo, explicó que la empresa “entiende que la responsabilidad social empresarial está ligada a una gestión ética del negocio, por lo que Pozuelo es una de las empresas que ha contribuido en diferentes ocasiones al combate del hambre y la pobreza”.
Como explicó Vélez, “estamos trabajando de la mano de dos aliados estratégicos como World Vision y el Banco de Alimentos, con quienes actuamos en conjunto para reducir la pobreza que afecta a la niñez de nuestro país”.
Fortaleciendo los ODS desde la acción
Si bien, mediante su programa de sostenibilidad, Pozuelo apoya los 17 ODS, una de sus 6 prioridades estratégicas, denominada “Construir una mejor sociedad”, es la que engloba sus iniciativas de reducción del hambre, la desnutrición y la pobreza.
De acuerdo con Francia Linares Orozco, Directora Ejecutiva de Banco de Alimentos, las alianzas entre las empresas privadas y las ONG están creando sinergias que generan beneficios para ambas partes. De esta manera, tras seis años de apoyo consecutivo de Pozuelo, se ha favorecido a 40 mil personas entre las que se incluye, población infantil y adolescente, familias en condición de vulnerabilidad social y grupos indígenas en riesgo.
A favor de la niñez y la juventud
Según Nathalia Vélez, de Pozuelo, el apoyo a World Vision se desarrolla desde el 2013 y se ha efectuado tanto en áreas rurales como urbanas. Por ejemplo, en proyectos rurales en Upala, Cañas y Siquirres.
En esta línea, los aportes de Pozuelo en conjunto con otros socios estratégicos y empresas patrocinadoras de World Vision han impactado a 3.500 niños y niñas que recibieron talleres para fortalecerles habilidades interpersonales y autoestima.
En instancias urbanas como La Carpio y Desamparados, el conglomerado de empresas que apoyan a World Vision, también han beneficiado a cerca de 600 niños, niñas y jóvenes a través de programas para la estimulación temprana y el desarrollo de creatividad en niños pequeños; como también, en niños más grandes y jóvenes, a quienes se les ofrecieron herramientas para su desarrollo académico, artístico, recreativo y emocional.
Paralelo a esto, Pozuelo también ha apoyado por dos años consecutivos el patrocinio de la “Marcha contra la Violencia Infantil” y se ha involucrado en el trabajado con padres y mentores de los pequeños para inculcarles modelos de paternidad responsable.
Edder Araya Fernández, Especialista en Incidencia Política de World Vision, nos comenta que los aportes de Pozuelo a las iniciativas de las ONG han posibilitado “una serie de acciones dirigidas a personas adultas y niños, niñas y adolescentes, para el desarrollo de habilidades para la vida, como recurso indispensable para su futuro, ese conjunto integrado de competencias personales, interpersonales y de pensamiento crítico para gestionar sus pensamientos, sentimientos y expresiones en la vida diaria en situaciones difíciles como las crisis, el conflicto y la marginación”.