Los padres de familia cuyos hijos permanecen en el servicio de Neonatología del hospital San Juan de Dios podrán leerle cuentos a sus hijos e hijas mientras permanecen en este servicio. Esto gracias a una donación de textos que realizó la Fundación para Padres de Niños Prematuros (Fundaprema).
Datos del centro médico muestran que la estancia mínima de los pequeños en este servicio es de cuatro días y la máxima de 90 y algunos padres pueden permanecer en el hospital largos periodos. En el 2018 estuvieron hospitalizados en esta unidad 917 recién nacidos.
Como parte de la colaboración la fundación también donó 77 cobijas hipoalergénicas para el egreso de los bebés, cuyas familias viven en pobreza extrema. Cada cobija lleva un mensaje de apoyo.
La caja de libros. La doctora Annie Miranda, coordinadora de enfermería en Neonatos, explicó que por medio de la lectura se fomentan los cuidados centrados en el desarrollo.
Con la lectura, manifestó, se estimula el sistema sensorial, en particular la audición y el sistema nervioso central; además, transmite tranquilidad al recién nacido, que estaba acostumbrado al vientre de su mamá que es un lugar acogedor y cálido, y que al estar internados están expuestos a ruidos de monitores, ventiladores, alarmas que son ajenas a ellos.
Viviana Fernández Ulate, presidenta de Fundaprema y mamá de un prematuro extremo, comentó que para ella la lectura hace del acompañamiento un proceso más activo y ayuda a que disminuir el estrés tanto en los papás como en el bebé. Con base en su propia experiencia, explica que son muchas horas las que están con sus hijos, esperando las indicaciones del personal de salud y a veces se quedan “mudos”, sin palabras, así que es una forma de compartir.
Fundaprema recibió los libros de cuentos mediante campañas de donación en escuelas, colegios y por parte de la Universidad Estatal a Distancia (UNED).
Estos libros se caracterizan por ser de oraciones cortas y sencillas, además son laminados y fáciles de desinfectar, y se guardan en una caja plástica para su protección.
Lectura con amor. Joab está internado desde el primero de agosto, su pronóstico era reservado. Desde entonces, este pequeño guerrero ha mejorado sustancialmente. Su mamá Deilyn Naranjo expresó que la iniciativa está muy buena, porque a veces se quedan en silencio para no molestar, esta es una forma estar hablando y compartiendo con su hijo. Ellos son de Pérez Zeledón, esperan regresar pronto a su hogar.
Ana Gretel Gamboa es la abuela de Julián, él es gemelo; ellos son sus primeros nietos, su hermano está en la casa con su mamá, también son de Pérez Zeledón. Ella lo ha acompañado durante más de 22 días de hospitalización. Para esta abuelita la lectura representa motivación para el bebé.
Abrigar la esperanza. Como parte de la colaboración de Fundaprema, además de los libros, se recibieron 77 cobijas hipoalergénicas, que están esterilizadas y empacadas para que el personal de salud las pueda entregar a familias que viven en situación de pobreza y que deben llevarse al bebé a su casa.
El doctor Roberto Araya, jefe del Servicio de Neonatología, explicó que muchas veces los papás del recién nacido son de una condición tan pobre que no tienen, ni siquiera, para comprar una cobija para llevarse al bebé a la casa, entonces esta donación es una contención para cuando se presente esta situación.
Viviana Fernández explicó que las cobijas fueron donadas por la empresa Taco Bell, gracias a que por medio de la oficina de Recursos Humanos lograron sensibilizar a los gerentes de los restaurantes sobre los bebés prematuros, en estas actividades se logró que cada uno de los participantes escribiera una carta para cada familia que recibirá una de estas cobijas.