La futbolista Melissa Herrera, de la Selección Nacional Mayor de Fútbol Femenino, dejó el martes anterior la concentración en Barranquilla con el fin de vincularse en los próximos días a su nuevo club, el Stade de Reims, de la División 2 de Francia.

Herrera participó en los tres primeros partidos de la Selección Nacional en los Juegos Centroamericanos y del Caribe Barraquilla 2018, contra Colombia (1-0), Jamaica (2-1) y Venezuela (2-1), pero no estará en la semifinal del próximo viernes ni en la última fecha, el lunes 30, cuando se disputen las medallas de oro, plata y bronce.

La jugadora viajará a Costa Rica para luego desplazarse a Reims, al noreste de Francia, con el fin de ponerse a disposición de su nuevo club, que debutará en la temporada 2018-2019 el 2 de setiembre de local ante el Saint Maur, en busca del ansiado ascenso a la Liga 1, tal como lo acaba de conseguir el equipo rojo y blanco masculino representativo de esa ciudad.

«Todo estaba planificado de esta forma, con la Federación y con el cuerpo técnico. Que yo viniera a los tres partidos y luego viajara a Francia. Gracias a Dios se logró el objetivo, sacamos la clasificación y aunque me hubiera gustado seguir en el torneo, sé que todas mis compañeras tienen la capacidad para jugar y lograr el resultado que queremos», comentó Herrera.

La futbolista indicó que una vez adaptada a su nuevo club espera tener nuevas convocatorias para jugar con la Selección Nacional, especialmente en las fechas FIFA que se avecinan con ocasión del Premundial de CONCACAF.

En su historial deportivo, la nacional, de 21 años, originaria de Ciudad Cortés de Osa, registra destacadas actuaciones con la Selección Nacional en el Campeonato Mundial de Canadá 2015 y en los Juegos Panamericanos de Toronto, también en ese año, y a nivel de clubes, con el Independiente de Santa Fé de Colombia. En Costa Rica jugó para Saprissa y Moravia, antes de dar un primer paso en el balompié internacional con el FC Indiana, en los Estados Unidos.