“Nambí” es el nombre con que el Programa de Investigación y Transferencia de Tecnología Agropecuaria en Frijol (PITTA Frijol) denominó la nueva variedad de frijol negro que fue liberada a finales del 2016, en Veracruz de Pérez Zeledón, en homenaje al Cacique Nambí, quien gobernara Nicoya y siguiendo la tradición de denominar las variedades desarrolladas con nombres de origen indígena.
El nuevo material se introdujo a Costa Rica en el 2011, como parte del Ensayo Regional de Líneas de Frijol de Grano Negro Tolerantes a los Efectos del Cambio Climático, con énfasis en sequía y la cruza original fue realizada en el Centro Internacional de Agricultura Tropical (CIAT). Se caracteriza por ser tolerante a sequía terminal, tiene un ciclo de producción más corto que las variedades actuales, además, tiene resistencia intermedia a patógenos como la mustia y mancha angular. La flor es morada y el grano es de color negro opaco y presenta excelentes índices productivos.
El proceso se dio bajo la metodología de fitomejoramiento participativo y se liberó 5 años después gracias al esfuerzo de los investigadores del Instituto Nacional de Innovación y Transferencia en Tecnología Agropecuaria (INTA) y la Universidad de Costa Rica (UCR), junto con los Comités Técnicos Locales de las organizaciones de Productores de Concepción de Pilas, El Águila, Veracruz, Guagaral y Chánguena, en la Región Brunca, y del Centro Agrícola Cantonal de Los Chiles, en la Región Huetar Norte, entre otros
“Nambí” llega en momentos cruciales para la agricultura nacional y para la producción de frijol en particular, cuando las afectaciones producto del cambio climático han sido más que evidentes. Es una variedad de grano negro comercial, arquitectura erecta, cuya principal característica es la resistencia a condiciones de sequía terminal, atributo que le confiere ventaja sobre las otras variedades de frijol disponibles”, detalló el investigador del INTA Juan Carlos Hernández, quien junto a Néstor Chaves, de la UCR, coordinaron los experimentos en el país.
“Se dispone un material sumamente prometedor, resultado del esfuerzo colaborativo entre investigador y productor. Este esfuerzo conjunto ha dado resultados y será la fórmula para seguir avanzando”, agregó Hernández.