Un total de 57 pinturas de mediano formato en diferentes técnicas, como óleo, acrílico y acuarela, conforman la exposición “Gatomix”, que plasma imágenes de gatos, elaboradas con diferentes formatos, soportes y técnicas.
Las obras, creación de la uruguaya nacionalizada costarricense, Patrizia Gallo, son un mix, porque según indicó la artista: “muestra muchos aspectos de mí, técnicas, estados de ánimo; diferentes partes de la personalidad y de la vida, porque todos somos una conjunción de colores”.
“Este último año ha sido de muchas experiencias y mucho crecimiento, por eso verán en esta muestra mucha variedad, mucho color y, sobre todo, mucha intensidad, que siempre caracteriza mi trabajo”, mencionó la artista.
“Gatomix” estará en exhibición desde este 7 de junio y hasta el 29 de junio, de 8 a.m. a 4 p.m., de lunes a viernes, en Centro de Patrimonio Cultural. La inauguración es abierta al público y la exhibición también hasta su finalización.
Gallo es profesora de ballet, dibujo y pintura. Dirige “7 Vidas/Bellas Artes”, donde enseña dibujo realista y pintura. Artista académica, es graduada del Atelier del Sol, en dibujo realista clásico. Es miembro invitada activa del grupo de arte Optimum Artis, Costa Rica. Es miembro de la Asociación Costarricense de Artistas Visuales de Costa Rica (ACAV). Ganadora del Premio Internacional Leonardo Da Vinci, artista universal, edición 2018, que recibió en el Palacio Borghese de Florencia, Italia, en enero pasado.
“Patrizia se ha destacado por su tema felino, utilizando este símbolo de dualidad; el gato como personaje místico e independiente. Su obra le permite plasmar su dominio por el dibujo, logra mezclar el uso de las líneas y la destreza de los colores; una gama cromática variada para crear esa sensación de realismo. Incluso usando colores violetas en las orejas, naranja en la nariz, eso no nos distrae de lo predominante”, opinó la curadora venezolana Alicia Palmero.
“Sus trazos son firmes, se desplazan para formar cada detalle de sus personajes, con grandes ojos que nos invitan a entrar en el cuadro, casi a palpar esa textura peluda. Lo más fascinante en sus obras, es el contraste de la figura central con el espacio que lo aborda. Esas figuras sobresalen, se anuncian y se mantienen en la memoria de quien los observa, aunque pareciera que fuera a la inversa”, agregó la curadora.