Con el objetivo de realizar encadenamientos productivos, alianzas estratégicas y encontrar nuevos proveedores, más de 6.000 profesionales del sector hotelero y gastronómico visitan desde ayer y hasta el jueves 14 en en la XVIII edición de Expo Hoteles y Restaurantes (Exphore).
La feria que se inauguró en el Centro de Eventos Pedregal, en San Antonio de Belén, es organizada por EKA Consultores Internacional. Este año convoca a 161 expositores proveedores del sector gastronómico y hotelero.
En la inauguración participaron Alberto López, gerente general del Instituto Costarricense de Turismo (ICT) y Karl Hempel, director de EKA Consultores.
Ambos hicieron un llamado al sector para que aprovechen encuentros como este, para mejorar sus servicios y con ello mejorar la oferta que hay en en país.
“El turismo es un sector que muestra un crecimiento sostenido durante muchísimos años y ese crecimiento tiene que ver con la cantidad de turistas que recibimos y por la calidad del servicio que damos. Este servicio pasa por la calidad de los hospedajes y mucho de eso tiene que ver con la calidad de los proveedores que estas empresas tienen.
«Poder ingresar a un evento como este, que tiene 18 años de historia y que registra más de 5.000 visitantes nos da una clara muestra de que efectivamente estamos haciendo las cosas bien desde todo nivel. El que haya proveedores comprometidos y apuntados con las empresas turísticas nos da una garantía de que el sector turístico seguirá creciendo desde el punto de vista de la calidad que se puede prestar en los servicios”, destacó López.
Por su parte Hempel agregó: “Expo Hoteles y Restaurantes vamos a encontrar 161 empresas registradas y 200 empresas participantes, además asisten representantes de las casas fabricantes que vienen directamente a la feria exclusivamente a hablar con las personas que están interesados en desarrollar un negocio relacionado con la gastronomía y la hotelería. Los asistentes que esperamos este año no solo van a encontrar respuestas a sus necesidades, si no también a problemas que ni siquiera sabían que tenían en sus negocios”.