El Ministerio de Salud busca presentar un proyecto de ley que permita incorporar la variable nutricional a la hora de seleccionar los productos incluidos en la canasta básica. Para ello convocó a una mesa interdisciplinaria que comenzará a trabajar en abril con el fin de tener una propuesta de reforma de ley que pueda ser presentada ante la Asamblea Legislativa en el primer periodo de sesiones extraordinarias del 2020.
El equipo interdisciplinario estará compuesto por representantes de la Caja Costarricense del Seguro Social, el Ministerio de Agricultura y Ganadería, el Ministerio de Economía, Industria y Comercio, el Ministerio de Bienestar y Desarrollo Humano, el Ministerio de Hacienda y el Instituto de Estadística y Censo, así como personeros de la Escuela de Nutrición de la Universidad de Costa Rica, la Organización Mundial de la Salud y de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura.
«Desde el Ministerio de Salud ya estamos trabajando en una propuesta metodológica que permita la incorporación del criterio nutricional en las variables que se analizan a la hora de incluir o excluir productos en la canasta básica. Ahora entraremos en una fase de valoración insterinstitucional con el fin de convertirlo en un proyecto de ley que incorpore los criterios de todos los entes relacionados con la materia, así como la valiosa asesoría de organismos internacionales» afirmó el Ministro de Salud, Daniel Salas.
Actualmente la canasta básica tributaria busca que el impuesto al valor agregado tenga un menor impacto en aquellos grupos de menores ingresos, sin embargo, el objetivo del Ministro Salas es que con la modificación a la ley se pueda incorporar las variables nutricionales con el fin de ir cambiando patrones de consumo.
«Como rectores del sector salud, nuestro afán es construir una propuesta de ley que otorgue las herramientas jurídicas para que la canasta básica no solo valore los patrones ya existentes de consumo, sino también se convierta en una política pública que permita incentivar la ingesta de alimentos no procesados, con contenido nutricional, bajos en sodios y bajos en grasas saturadas, y de esta forma, acompañado de esfuerzos de concientización, podamos ir modificando los patrones de consumo en la población y principalmente en los sectores de menores ingresos» concluyó el Ministro Salas.