Con el propósito de concienciar a la población costarricense sobre la necesidad de reducir el consumo de sal y sodio, instituciones del sector salud de Costa Rica se están organizando para lograr un cambio de comportamiento, actitudes y prácticas en relación con el consumo de estas sustancias.
Una de las preocupaciones de las especialistas en nutrición de la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS) y del Instituto Costarricense de Investigación y Enseñanza en Nutrición y Salud (INCIENSA), es que en Costa Rica se ingiere casi el doble de la cantidad de sal que, según la Organización Mundial de la Salud (OMS), se debe consumir.
A juicio de los especialistas, este hecho es de gran relevancia, toda vez que el consumo de sal y sodio está directamente relacionado con la hipertensión arterial y el incremento de la presión arterial es un factor de riesgo de los padecimientos cardiovasculares.
Como parte de este esfuerzo de sensibilización que coordina el Instituto de Investigación y Enseñanza en Nutrición y Salud (INCIENSA), a partir de este lunes, se desarrollarán en territorio nacional dos actividades internacionales que congregarán a profesionales de instituciones del sector Salud.
Se trata del segundo taller internacional denominado Aplicación del mercadeo social en la creación de capacidades y la reducción de la ingesta de sal en América Latina: Desarrollo de estrategias creativas, el cual se realizará con fondos del Centro Internacional para el Desarrollo de la Investigación de Canadá (IDRC) del 18 al 20 de febrero y es organizado, de manera conjunta, por el INCIENSA y el Centro Colaborador de Mercadeo Social de la Organización Mundial de la Salud (OMS), ubicado en la Universidad de Florida del Sur.
En esta oportunidad, se presentarán los resultados de las investigaciones formativas realizadas por cada uno de los países, un resumen creativo regional y un enfoque de comportamiento meta para la estrategia regional de reducción del consumo de sodio en la población mediante esta disciplina.
Este conocimiento será de gran utilidad para apoyar la Iniciativa de la Organización Panamericana de la Salud (OPS) y (OMS) sobre la Prevención de las Enfermedades Cardiovasculares mediante la Reducción de la Sal y el Programa para la Reducción de Consumo Excesivo de Sal/Sodio en Costa Rica, declarado de interés público y nacional mediante el decreto ejecutivo DM-MG-1083-2013.
Posterior al taller, se llevará a cabo del 20 al 22 de febrero la Reunión Internacional del proyecto IDRC 108167 «Escalando y evaluando las políticas y programas de reducción de sal en países de América Latina» con todos los representantes de los países participantes y los asesores técnicos internacionales y se brindará un homenaje a la Dra. Mary L’Abbe, recién condecorada con la “Orden de Canadá” por sus contribuciones en la salud pública. La Dra. L’Abbe es asesora técnica de proyecto, profesora de la Universidad de Toronto, directora del Iniciativa de la sobre la Prevención de las Enfermedades Cardiovasculares mediante la Reducción de la Sal y del “Nutrition Guidance Expert Advisory Group on Diet and Health” de la OPS/OMS, entre otros importantes cargos.
La sede de ambas actividades será el hotel Hyatt Place en Pinares de Curridabat y contará con la presencia de autoridades del INCIENSA, el Ministerio de Salud de Costa Rica, la OPS) el IDRC de Canadá y de la Embajada de Canadá.
Cabe recordar también que del 4 de marzo al 10 de marzo se realizará la Semana Mundial para la Concientización sobre la salud 2019, en la cual la CCSS tiene gran interés en promocionar, toda vez que los estudios institucionales revelan que un 36% de la población es hipertensa y ese es uno de los factores de riesgo más importantes para la gestación de las enfermedades cardiovasculares. Durante el 2017, la CCSS invirtió ¢78 898 millones en la atención de enfermedades cardiovasculares, lo cual representa cerca del 4% del gasto total institucional.
La OMS recomienda un consumo de 5 gramos al día, mientras que en Costa Rica esa ingesta se duplica. De ahí la urgencia que tienen los especialistas de desarrollar estrategias que permitan motivar la población a bajar el consumo de sal y sodio.