Se inauguró Parque Infantil en San Felipe de Alajuelita

Con el objetivo de garantizar el cumplimiento de los derechos de las personas menores de edad relacionado con el derecho al juego, actividades recreativas, deportivas y culturales, que les permitan aprovechar su tiempo libre de forma sana, el domingo 3 de febrero, se inauguró el parque infantil ubicado frente al Centro Educativo de Tejarcillos de Alajuelita.

Cabe destacar que este parque se ubica en un terreno de 24 hectáreas, en el barrio de Tejarcillos, localidad del distrito de San Felipe. Precisamente, esta iniciativa partió de una propuesta de la propia comunidad para fortalecer la inclusión social y el desarrollo humano. El Parque tendrá la finalidad de promover la convivencia social y el desarrollo de capacidades mediante una oferta programática y servicios de alta calidad en cinco áreas para el desarrollo integral: cultura, desarrollo económico, deporte, recreación y ambiente.

Esta obra se desarrolló en el marco del convenio interinstitucional entre el Patronato Nacional de la Infancia (PANI), que aportó ¢65 millones, el Ministerio de Cultura y Juventud (MCJ) que aporta el terreno y la Municipalidad de Alajuelita que ha sido el ente encargado de la administración de la contratación del proyecto y la cual aportó recursos para construir con algunas mejoras previas a la obra. Dicho convenio tiene como objetivo “Contribuir para que los niños y niñas y adolescentes tengan dentro de sus comunidades espacios para su desarrollo personal, familiar y comunal”.

El programa Parque de Desarrollo Humano del cantón de Alajuelita es coincidente con el Área Estratégica de Articulación Presidencial de Seguridad Humana. Que pretende impulsar políticas y estrategias que propicien condiciones favorables al desarrollo humano y la construcción y preservación de entornos protectores.

El Parque de Desarrollo Humano de Alajuelita se conceptualiza “como un foco de desarrollo basado en la atención y capacitación a la población con altos niveles de pobreza, que fortalecerá las capacidades blandas, las competencias para el empleo, el desarrollo de liderazgo e innovación social, la generación de valor a partir del trabajo creativo y la gestión responsable con el medio ambiente y el entorno social, adicionalmente a otras posibilidades de desarrollo, participación y expresión de la población”, según lo establece en el Decreto.

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