La comodidad y la seguridad que garanticen la salud postural y de la espalda de los menores durante todo el curso lectivo, son los factores principales que los padres de familia deben tener en cuenta, al momento de elegir el salveque escolar que mejor se adapta a las necesidades del niño, manifestaron especialistas en terapia física de la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS).
De acuerdo con el doctor César Delgado, especialista en Terapia Física y Rehabilitación de la CCSS, con la cercanía del regreso a clases, es habitual que muchos padres cuestionen sobre el tipo de mochila que deberían adquirir para sus hijos y aunque, en ocasiones, existe cierta incertidumbre sobre cuál debería ser la opción más adecuada, aseguró que como primera medida para disminuir el riesgo de lesiones sobre la espalda, los hombros, la columna, los menores no deben transportar una carga que supere el 10% de su peso corporal, por lo que una de las recomendaciones más importantes es que el bulto sea equilibrado y su tamaño debe estar en relación con la estatura y el peso del niño.
Según explicó, el exceso de peso podría ocasionar lesiones en la espalda y en la columna de los niños, debido al sobreesfuerzo o fatiga muscular, así como el incremento de las caídas por inestabilidad en la marcha, ante esta situación, resulta importante tomar en cuenta el peso y la estatura del menor y de esta manera, evitar que se genere algún inconveniente al momento de cargar los útiles.
Mochila convencional
Según el especialista, esta es una elección para muchos padres e hijos y su efecto no tendría por qué ser perjudicial, si se aprende a distribuir el peso y a colocarla en la espalda a una altura adecuada.
Tome en cuenta las siguientes consideraciones:
- Debe colgarse en ambos hombros y nunca sobre uno solo.
- Debe sujetarse firme y centrada en la espalda.
- Elija la opción con correas anchas y acolchadas.
- No debe reposar sobre los glúteos y la carga más pesada debe ir en contacto con la espalda.
- La carga del material didáctico en su interior debe ser estable y distribuida de forma equilibrada en los diferentes compartimentos.
Mochila de ruedas
En caso de que la mochila sobre ruedas sea la opción que se adquiera, el funcionario aseguró que el niño la debe trasladar de la misma forma que el carrito de compra del supermercado, con empuje hacia adelante, o bien, estar atentos a que los menores vayan tirando de él y de forma alterna en los brazos para no sobrecargar uno de ellos.
Manifestó, además, que, al elegir este tipo de salveque hay que tener en cuenta que no todas las aceras, ni entradas y salidas de los centros educativos están adaptados para el paso de ellas, así como la posibilidad de aumentar el riesgo de molestias en las muñecas si se levanta el peso de esta mochila al momento de subir una escalera, o bien, dolores en la espalda si el mango de donde se tira no posee la altura adecuada, no es regulable o se lleva una postura incorrecta.
Según el doctor Delgado, cualquiera de las dos opciones puede ser ideal siempre que se tengan en cuenta las necesidades y particularidades de cada niño, el trayecto que se realizará hasta llegar a la escuela, si el traslado será en transporte escolar a o a pie, así como las características de las instalaciones en que estudiará.
El funcionario motivó, también, a aprovechar los casilleros que se les asigna a los estudiantes en las aulas para almacenar algunos materiales y de esta manera, evitar su traslado diario de forma innecesaria.