Ligia Madrigal es la mujer que más veces ha realizado La Ruta de los Conquistadores y en esta edición, la decimoquinta para ella, será más que especial. Arranca su proceso físico para convertirse en la primera costarricense en escalar hacia lo más alto del famoso Monte Everest, el pico más alto del planeta.

“Llevo muchos años compitiendo en montaña y venía hablando desde hace un tiempo con Wagner Rojas, que tal vez me gustaría adentrarme más en la alta montaña, tuve una experiencia de alpinismo en Los Alpes y me gustó mucho, por lo que quería ahora cambiar un poco de adentrarme en esas montañas que no se pueden subir corriendo. Entonces surgió el reto de intentar ser la primera mujer costarricense en subir el Everest, y con quien más me iba a sentir segura de subirlo, que con Wagner”, explicó con emoción la deportista.

Y entonces, La Ruta 2018 será su primera prueba física, y en inicio de esta travesía hasta el Himalaya. “Tras La Ruta tengo una carrera en setiembre en Italia, y después vamos a empezar a subir montañas. Es un proceso, todo el 2020 subiré otras montañas más altas, “unas 7 miles”, probarme y aprender bien la técnica para ver cómo se comporta mi cuerpo en la altura, y después ya tratar de subir a la cima de Everest (8.848 metros sobre el nivel del mar) en mayo del 2021”, agregó.

Recordó que hizo su primera Ruta en el año 2000, “esta sería mi número 15, las que no he hecho fue porque en una estaba muy agotada y en otra por embarazo, ahí falté a dos porque tuve a mi hija, y hace dos años que tuve un accidente entrenando y no pude hacerla. Pero siempre he tratado de estar ahí todos los años, es una carrera que significa mucho para mí, es como mi cierre de año y me encanta”.

Sentimiento aparte. Sin embargo, Madrigal nunca ha podido ganarla. “He quedado dos o tres veces de segunda, he ganado en mi categoría, pero vienen ciclistas buenísimas y solo haber quedado en ese segundo lugar es buenísimo para mí. Empecé tarde en el ciclismo, a los 28 años y ahora tengo 45, ya soy máster entonces ya cuesta más. La Ruta para mí más que una competencia es como una aventura, un reto personal, para mí es ese reto de atravesar el país de costa a costa que no tiene precio, cruzar esa meta (en Limón) es un sentimiento tan fuerte, que vale la pena, ese es el premio”, citó.

Ligia Madrigal lo tiene claro, primero La Ruta, y después poco a poco el Everest. “La Ruta me inspirará, cada paso que yo siempre doy digo, no esto no es más duro que aquella vez que crucé Carara, todo se viene a la mente y uno se siente más confiado cuando ha vencido retos como es La Ruta de los Conquistadores”, concluyó.