Muchos mitos sobre las dietas llegan y después desaparecen, pero algunos han pasado la prueba del tiempo. ¿Por qué nos aferramos a estos mitos sobre la comida, aun cuando sabemos que a lo mejor no son verdad?
A menudo es porque la idea que hay detrás del mito parece tener sentido y, por lo tanto, queremos creerla.
He aquí cuatro de los mitos más comunes sobre las dietas y por qué simplemente no son verdad:
1) Pesarte todos los días puede ser desalentador cuando estás tratando de bajar de peso.
Realidad: El peso corporal varía de un día a otro, a veces, hasta por un par de libras. Si te pesas cada mañana, probablemente has experimentado esto, especialmente después de haber comido una cena pesada la noche anterior. Aun así, mucha gente cree que si no ves a diario una disminución sistemática en el peso corporal, te desanimarás y abandonarás tus esfuerzos. Por el contrario, muchos estudios han demostrado que quienes vigilan su peso a diario tiene más probabilidad de bajar de peso y mantenerlo.
2) Los carbohidratos te engordan.
Realidad: Los carbohidratos tienden a tener mala fama entre quienes hacen dieta, pero esto se debe principalmente a la falta de información. Para la mayoría de la gente, carbohidrato significa alimentos con fécula como el pan blanco, los cereales, las galletas saladas, el arroz blanco o las papas o, quizás, los azúcares y los dulces. Sin lugar a dudas, esos son carbohidratos. Pero también existen carbohidratos en alimentos saludables como las frutas, verduras, frijoles y granos integrales. Por lo tanto, juntar a todos esos alimentos y afirmar que te engordan, no es correcto.
Lo que importa es esto: las fuentes de carbohidratos saludables son más sustanciosos que los carbohidratos altamente procesados y poco saludables y puede ser sumamente fácil agregar calorías con los carbohidratos refinados. Sin embargo, las verduras con alto contenido de fibra, los granos integrales, los frijoles y la fruta son más sustanciosos que los carbohidratos refinados, entonces elige correctamente.
3) Cenar antes de dormir hace que aumentes de peso.
Realidad: Mucha gente cree que comer calorías al final del día de alguna manera hace engordar más que cuando las comes más temprano. La creencia es que debes comer más calorías durante las horas en que estás activo para que puedas quemarlas y si consumes calorías antes de ir a dormir, se quedarán almacenadas ya que no las quemarás. Pero si a cualquier hora del día consumes más calorías de las que necesitas, de todas maneras las almacenarás.
4) Consumir bocadillos es un mal hábito que contribuye a aumentar de peso.
Realidad: A menudo, consumir un bocadillo se considera un mal hábito por dos razones: algunas personas piensan que esto agregará un exceso a las calorías que necesitas para el día y otras creen que los bocadillos sólo sirven para agregar grasa, sal, azúcar y calorías al organismo. Lo que es verdad, es que no todas las personas consumen bocadillos saludables. Pero cuando lo hacemos con prudencia, los bocadillos pueden ser un hábito saludable que pueden ayudarte a controlar el peso y a mantener los niveles de energía a lo largo del día. Planea inteligentemente tus bocadillos y en lugar de esperar a que tengas antojos, ten a la mano opciones saludables como fruta, yogur, frutos secos o una barra de proteína para así evitar la tentación de la comida chatarra.